Han asistido más de 17.000 personas y no se han producido incidentes pese a la gran afluencia de peregrinos y de vehículos
La segunda jornada de la Javierada, en Navarra, ha transcurrido con toda normalidad bajo la protección de 400 agentes de la Guardia Civil, que se han preocupado de atender cualquier tipo de incidencia con el despliegue de medios terrestres y aéreos. Según fuentes de la Benemérita, han acudido al Castillo de Javier 192 autobuses; 1.750 turismos, con un total de más de17.000 personas.
En el despliegue han participado agentes de la Agrupación de Gráfico que perderán competencias a partir del 1 de julio por los acuerdos Gobierno-Bildu. Sin embargo, no se desaparecerán de las carreteras navarras ya que abre un periodo transitorio de unos cinco años en los cuales se realizará la llamada «pasarela», para que los agentes que lo deseen pasen a la Policía Foral, cuerpo que tendrá que alcanzar la cifra de 149 agentes más.
El origen de esta peregrinación se remonta al siglo XIX; en 1885 una epidemia de cólera se extendió por Pamplona. La Diputación Foral realizó una promesa a San Francisco Javier: el pueblo entero de Navarra iría en peregrinación a su Castillo con el deseo de quedar libres de la enfermedad. Con anterioridad, eran muchos los que iban a orar ante el Cristo en lo que es una tradición en la Comunidad Foral.
