Los pisos se encarecerán hasta un 10% en Aragón por los altos costes

El precio de las viviendas se verá condicionado este año por el incremento de los costes de las materias primas. El sector de la construcción y la promoción afronta una incesante subida de las materias primas que se trasladarán al comprador de forma que el encarecimiento de los inmuebles podría alcanzar el 10% en algunos casos, según asegura el presidente de la Asociación de Constructores Promotores de Zaragoza y director general del Grupo Lobe, Juan Carlos Bandrés. «El que se atreva a sacar una promoción tendrá que comercializarla entre un 8 y un 10% más cara si quiere tener algún margen de beneficio», subraya.

Un informe de la constructora ACR refleja que los costes directos de la construcción repuntaron un 23,5% durante 2021 hasta alcanzar registros históricos. Esta cifra contrasta con el descenso del 3,8% anotado en 2020 y que coincidió con el parón de la actividad por la declaración del estado de alarma durante el primer año de covid.

El vidrio, por ejemplo, repuntó el pasado año por encima del 49%, mientras que las estructuras lo hicieron un 34%, las divisiones interiores el 26,8%, los alicatados, soldados y carpintería de madera aumentaron más del 13% y las pinturas e impermeabilizaciones alrededor del 10%. Y todo ello antes de que se iniciara la invasión de Ucrania por parte de Rusia, que ha disparado los precios de la energía. Este año, por tanto, los materiales están más caros.

La buena noticia es que el sector inmobiliario ha demostrado una buena salud a pesar del coronavirus. Aragón cerró 2021 con la mejor cifra de operaciones desde 2008, con casi 15.000 compraventas, según los datos que refleja el Informe Inmobiliario de Aragón correspondiente al pasado ejercicio. Con todo, la presión por el incremento de los precios en el acero, el cemento, los aislantes, el ladrillo, el yeso y el aluminio, entre otros materiales, han encendido las alarmas en el sector. En la construcción, el margen de beneficio con el que se suele trabajar ronda el 3%, precisa Bandrés, lo que da poco margen de maniobra ante la subida de costes.

Aragón cerró 2021 con la mejor cifra de operaciones desde 2008, con casi 15.000 compraventas, según los datos que refleja el Informe Inmobiliario de Aragón

«El aumento de las materias primas está siendo tremendo», asegura el gerente de la Fundación Laboral de la Construcción, Vicente Lafuente, que recuerda que «los precios no han dejado de subir» desde el pasado año. Solo durante los últimos meses, el incremento del coste de la energía ha provocado un encarecimiento de estas materias primas de entre el 10 y el 15%. Pero lo peor es la «inquietud» que se respira en el sector, ya que no sabe a qué atenerse, cuánto más subirán los costes de producción y cómo cerrar los contratos. Esta situación también se está trasladando ya a la obra pública.

Paralización de proyectos

En este contexto, negociar el precio de la construcción y la comercialización de viviendas resulta más que complicado que nunca, ya que entre la firma de un proyecto y la entrega de la obra pueden transcurrir varios meses, un periodo en el que nadie sabe cómo evolucionarán los precios.

«Esta situación puede derivar en una cierta paralización de proyectos y en un estancamiento del sector, ya que habrá promociones que ni siquiera se iniciarán a la espera de que se estabilicen los elevados costes», destaca el responsable de la Federación de Construcción de UGT Aragón, Manolo Grande.

«Esta situación puede derivar en una cierta paralización de proyectos y en un estancamiento del sector, ya que habrá promociones que ni siquiera se iniciarán a la espera de que se estabilicen los elevados costes»

No obstante, por ahora no se han tenido que parar obras, algo que sí ha ocurrido ya en otras partes de España, afirma el presidente de la Asociación de Constructores Promotores de Zaragoza, que lamenta que el sector se encuentra «absolutamente agotado y tocado, económica y psicológicamente» puesto que arrastra tres crisis consecutivas, la de 2008, que hundió gran parte del tejido productivo; la pandemia y ahora la crisis de precios.

Desde la perspectiva del empleo, la situación es «estable» en Aragón donde trabajan alrededor de 38.000 personas en el sector, precisa Grande, que considera que no se producirá una merma de mano de obra. En cualquier caso, tanto él como el presidente de la Fundación Laboral de la Construcción aluden a la falta de profesionales cualificados en el sector.

Más de 4.000 empresas

La construcción mira al futuro con cierto optimismo en la comunidad aragonesa, aunque tendrá que sortear algunos escollos como el alza de los precios. La gran recesión del 2008 dejó muy tocado a un sector que hoy suma un total de 37.347 trabajadores en Aragón, lo que supone un 4% más que hace un año.

El dinamismo experimentado por la vivienda nueva en la comunidad durante los últimos años y el ahorro acumulado por el descenso del consumo durante la pandemia han sido los mejores aliados del negocio inmobiliario, que se ha convertido en un nicho de inversión para muchos ahorradores aragoneses.

Un informe de la Fundación Laboral de la Construcción incide en este mejor comportamiento, ya que el número de empresas vinculadas con el ladrillo superó la barrera de las 4.000 en Aragón, es decir, casi un 1,2% más de las que había un año atrás.

El total de visados rozó los 2.500 hasta septiembre del pasado año en la comunidad, lo que representa un 43,8% más respecto al año anterior. De estos, 1.759 fueron de obra nueva (40,3% más).

El mismo estudio refleja que entre las principales ocupaciones del sector en octubre de 2021 figuraba la de peón de la construcción de edificios, con 3.563, lo que supone un 6,5% más. Por detrás se situaban los albañiles que suscribieron 3.431 contratos. Estas dos categorías aglutinaron el 35% del total. Además, los electricistas sumaban 1.800 contratos, mientras que por debajo de los mil se encontraban los encofradores y operarios de puesta en obra de hormigón, los montadores de estructuras metálicas, los peones de las industrias manufactureras, los operadores de maquinaria de movimientos de tierras, oficiales, operarios y artesanos de otros oficios, y los fontaneros.

En cuanto a las actividades que generaron un mayor impacto en el mercado laboral, destaca la que se centra en trabajos especializados (12,223 contratos), seguida por la construcción de edificios (7.034) e ingeniería civil, con 768 firmas.

En este sentido, el volumen de licitación de obra pública acumulada hasta octubre registró un total de 574 millones de euros. Se trata de un 125% más que en el mismo periodo del año anterior y un 3% del total licitado a nivel nacional, según el informe de la Fundación Laboral de la construcción en Aragón.