Será dentro del proyecto Upstream en el que participan seis países europeos
Los microplásticos están cada vez más presentes en nuestro día a día. Están en el aire, en los alimentos, en los envases que utilizamos y, cada vez más, en el agua que consumimos. Suponen, de hecho, un desafío medioambiental que está impulsando ya diferentes iniciativas para trabajar en su eliminación. Es el caso del proyecto europeo Upstream en el que desde este mes de septiembre participará la depuradora de La Almozara. El objetivo del mismo es analizar la presencia de microplásticos en el río Ebro.
Se trata de un sistema específico para recoger y analizar muestras de agua con el fin de cuantificar los microplásticos que permanecen tras el tratamiento de depuración, justo antes de que el agua se vierta al río. Este módulo, según ha explicado el consejero de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, permitirá determinar el volumen, tipo y tamaño de estas partículas.
Para ello, desde septiembre y durante un año se procederá a realizar diferentes análisis en la depuradora de La Almozara durante una semana al mes que permitan extraer este tipo de datos. En cualquier caso, para tener una foto completa, las conclusiones definitivas, que incluirán también información sobre el comportamiento de la ciudad en diferentes momentos del año, se conocerán en septiembre de 2026.
La iniciativa forma parte del proyecto europeo Upstream, enmarcado en el programa Horizon de la Unión Europea, que busca prevenir y eliminar la contaminación por plásticos y microplásticos en siete ríos europeos: Ebro, Danubio, Queich, Olona, Tesino, Trent y Servern. Coordinado por el Centro Tecnológico Aittip y con la participación del Leitat Technological Center, este plan persigue desarrollar hasta quince soluciones innovadoras para reducir la presencia de estos residuos en distintos ecosistemas.
El proyecto, que cuenta con una inversión global cercana a los ocho millones de euros, reúne a socios tecnológicos punteros y a los países atravesados por estos ríos: Reino Unido, Italia, Alemania, Serbia y España.
NORMATIVA EUROPEOA SOBRE MICROPLÁSTICOS
Este trabajo cobra además especial relevancia tras la aprobación, a finales de 2024, de la nueva Directiva Europea 2024/3019 sobre depuración de aguas. La normativa establece que, a partir de 2045, las depuradoras de ciudades del tamaño de la capital aragonesa deberán eliminar tanto microplásticos como contaminantes emergentes procedentes de fármacos y cosméticos.
Sin embargo, la falta de tecnologías plenamente desarrolladas para este fin hace que proyectos como Upstream sean clave para avanzar en la búsqueda de soluciones eficaces.