Los jefes de prensa del PSOE y sus socios piden a Batet que censure a medios acreditados en el Congreso

El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, a su llegada a una sesión plenaria en el Patio del Congreso de los Diputados, a 30 de noviembre de 2021. El Pleno del Congreso toma en consideración hoy Proposición de Ley de Memoria, Dignidad y Reparación de todas las Víctimas del Terrorismo, presentada por el Grupo Parlamentario Ciudadanos. El Pleno decide también hoy sobre la proposición no de ley del Grupo Parlamentario Republicano sobre el incremento del impuesto del juego y la limitación de su publicidad. Además, el Congreso ve hoy Proposición no de Ley sobre las medidas a implementar para la mejora de la línea ferroviaria Santander-Bilbao, impulsada por el Grupo Parlamentario Vasco. 30 NOVIEMBRE 2021;CONGRESO DE LOS DIPUTADOS;MADRID;PLENO;PROPOSICIÓN DE LEY DE MEMORIA;VÍCTIMAS TERRORISMO Ricardo Rubio / Europa Press 30/11/2021

Los equipos de comunicación del PSOE y de sus aliados políticos han emitido un comunicado conjunto en el que exigen al Congreso que tome medidas contra «las faltas de respeto» y «el clima de tensión» que se ha instalado en los últimos meses en la sala de prensa de la Cámara Baja. Portavoces parlamentarios como el de ERC, Gabriel Rufián, se niegan a contestar sistemáticamente preguntas de un grupo de medios recientemente acreditados que califican de «extrema derecha», y ahora solicitan implícitamente que se actúe contra ellos.

«No participamos en burbujas mediáticas de la extrema derecha», responde Rufián cada vez que le formulan una pregunta, sea cual sea. Una práctica similar a la que utilizó inicialmente el portavoz de Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, quien decía no responder a canales de YouTube sino a periodistas «de verdad».

La controversia se ha sucedido durante semanas hasta el comunicado de este miércoles, con una polémica frase en la que los partidos firmantes parecen indicar a la prensa el tipo de preguntas que quieren recibir: «Lo que deberían ser comparecencias de actualidad parlamentaria se están convirtiendo en careos ideológicos».

Sin citarles en ningún momento, el comunicado alude a Estado de Alarma y a 7nn. Los firmantes solo hacen referencia a «algunas personas acreditadas» en el Congreso y subrayan que su comportamiento «desvirtúa las ruedas de prensa» y «dificulta el trabajo del resto de periodistas que realizan su labor con profesionalidad». Los partidos denuncian «intolerables faltas de respeto» hacia el personal de algunos grupos parlamentarios «que rompen el clima de cordialidad y decoro entre periodistas, políticos y personal de los grupos parlamentarios».

«Este modo de actuación no se corresponde con el código deontológico ni con los principios de actuación acordados por los y las profesionales del ramo», inciden, sin hacer autocrítica por la negativa de algunos portavoces a responder a ciertos medios.

Los jefes de prensa de PSOE, Unidas Podemos, ERC, PNV, EH Bildu, Junts, PDECat, Más País, CUP, Compromís, BNG y Nueva Canarias instan a la Cámara Baja a tomar «las medidas necesarias», sin especificar cuáles, para «restablecer el buen funcionamiento de las ruedas de prensa» en el Congreso «sin poner en riesgo la libertad de información y el buen clima en la sala de prensa que, desde siempre, se venía produciendo».

El portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha reaccionado en Twitter al comunicado y ha advertido de que los partidos políticos no pueden decidir qué periodista entra o sale del Congreso. «Pretenderlo es antidemocrático», ha sentenciado.