El operador contacta con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para hacer una nueva consulta pública
La estabilidad del sistema eléctrico español vuelve a estar en entre dicho. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha recibido una petición por parte de Red Eléctrica para elaborar una consulta pública de urgencia tras detectar variaciones que podrían poner en jaque otra vez el suministro español y evitar nuevos apagones.
«En las últimas dos semanas de variaciones bruscas de tensión en el sistema eléctrico peninsular español, tales que pueden tener impacto en la seguridad del suministro si no son implementados los cambios propuestos», señala el documento publicado este miércoles a última hora de la tarde la CNMC.
«De acuerdo con la información facilitada a la CNMC por el operador del sistema, las variaciones rápidas de tensión registradas en estas dos últimas semanas, aun estando siempre las tensiones dentro de los márgenes establecidos, potencialmente pueden desencadenar desconexiones de demanda y/o generación que terminen desestabilizando el sistema eléctrico», señala el documento.
Cabe destacar que las advertencias de la empresa dirigida por Beatriz Corredor se enmarca dentro del trámite de información pública sobre la propuesta de resolución por la que se modifican temporalmente varios «procedimientos de operación eléctricos para la introducción de medidas urgentes para la estabilización de la tensión en el sistema eléctrico peninsular español”.
La nueva consulta, a su vez, coincide con la nueva versión del consejo de sabios europeo. El pasado viernes dieron una nueva versión de los hechos aunque la patronal de los gestores eléctricos dejaron claro que no será hasta el próximo 2026 cuando no se tenga toda la información para dar un veredicto correcto de todo lo que ocurrió.
A partir de esta nueva advertencia, las empresas y el sector energético tendrán hasta el próximo 15 de octubre en hacer alegaciones.
En los últimos días El Periódico de la Energía y El Mundo han informado en diversas informaciones que se han producido diversas variaciones bruscas de tensión eléctrica. La semana pasada el gestor eléctrico envió un comunicado a todos los centros de control de España, a través del CECRE (Centro de Control de Energías Renovables), en el que anunciaba una serie de cambios importantes en la integración de energías renovables en el sistema eléctrico, «con el objetivo de reducir las variaciones bruscas de tensión».
Con todo, la CNMC propone diversos cambios para poder evitar las variaciones de tensión que ponen en peligro la posibilidad de que España vuelva a quedarse en cero energético, tal y como ocurrió aquel fatídico 28 de abril.
Diversas medidas urgentes para evitar el apagón
Entre otras, destaca la de flexibilizar «la hora de publicación del Programa Diario Viable Provisional (PDVP) con objeto de garantizar que se publica una solución completa de restricciones técnicas tras el Programa Diario Base de Funcionamiento (PDBF), evitando la traslación de un volumen de redespachos por restricciones al proceso de resolución en tiempo real y reduciendo así la necesidad de activación de energías de balance».
Además, se incorpora la posibilidad de gestionar la programación de generación por falta de reserva a subir en el proceso de resolución restricciones técnicas al PDBF – hoy en día programada en restricciones técnicas en tiempo real-, al objeto de reducir el desequilibrio de energía en tiempo real y con él la necesidad de energía de balance.
Por otra parte, la CNMC busca obligar a los grupos programados a reservar toda su capacidad para ofrecerla en los mercados de balance, es decir, que las instalaciones no puedan reducir su reserva de potencia en los mercados intradiarios.
El SRAD, a debate
Conviene recordar que el sector eléctrico está a la espera de que salgan adelante las nuevas modificaciones del mecanismo de seguridad que evita apagones. Este mecanismo regulatorio, introducido por el Real Decreto-ley 17/2022, es fundamental porque permite a los grandes consumidores eléctricos reducir su demanda de energía en situaciones puntuales de desequilibrio, es decir, cuando la generación disponible no es suficiente para cubrir el consumo total, evitando así cortes de suministro en los hogares y protegiendo la estabilidad general del sistema eléctrico.
Tras una consulta pública lanzada el pasado verano —a la que las empresas y agentes del sector enviaron sus propuestas para mejorar el sistema—, fuentes del sector indican que la publicación del dossier definitivo es inminente. Este hecho coincide estratégicamente con el inicio de las bajas temperaturas y el consecuente aumento del consumo eléctrico, un periodo en el que la demanda tiende a incrementarse notablemente debido al uso masivo de calefacciones y aparatos eléctricos de alto consumo.