El expresidente del Gobierno de Aragón recibe la Medalla de Aragón 2024 y asegura que la llevará “prendida en el corazón” hasta su último día de vida
El socialista llama con un discurso conciliador a retomar el legado de los “padres fundadores” del Estatuto de Autonomía
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Con un hilo de voz tenue pero firme, Javier Lambán ha llamado a la sociedad civil y política de la comunidad a “aragonesizar España” para cumplir con un objetivo: alcanzar el año 2036 con los valores y el espíritu de 1978, “que está en riesgo de torcerse”, y no los de 1936. “Invoco a lo mejor de nosotros mismos para que los aragoneses nos convirtamos en adalides por excelencia de la defensa de la Constitución y del Estatuto de Autonomía. Tenemos que demostrar nuestro amor por España aragonesizando España desde el amor a la verdad, la moderación, el sentido común, el temple y el respeto a las leyes. Invoco a todas las instituciones para que entre todos lo hagamos”, ha dicho el socialista, que ha recibido hoy la Medalla de Aragón 2024 por su desempeño como jefe del Ejecutivo autonómico durante los últimos ocho años.
“Llevaré prendida esta medalla al corazón hasta el último día de mi vida”, ha afirmado Lambán con la vista puesta en su sucesor, Jorge Azcón, que observaba con atención a su vera. “Esta medalla tiene un significado mayor que reconocer a un presidente: es el cumplimiento de un ritual de continuidad que hace de la política algo grande”, ha señalado el político ejeano, que, citando a Manuel Azaña, ha subrayado que “el buen político ha de sentirse embargado por la continuidad cuando un legado y sentir que tiene la obligación de mejorarlo y, sobre todo, de facilitarle las cosas a su sucesor para que el a su vez engrandezca el legado que recibió”. “Y te aseguro, querido presidente Azcón, que tendrás todo mi apoyo para que tu presidencia sea un éxito porque también lo será para Aragón”, ha resaltado Lambán.
Javier Lambán, durante un momento de su discurso. / JAIME GALINDO
En un discurso con un elevado tono conciliador, Lambán ha reivindicado la labor del cuatripartito, un Gobierno “que le dio estabilidad a esta comunidad” y “reconstruyó” la sanidad, la educación y las políticas sociales “tras los injustísimos recortes a los que nos impuso Europa”, un mérito que atribuyó a sus consejeros. “Fuimos consecuentes con el legado de los padres fundadores de la autonomía en el camino de afianzar a Aragón dotándonos de voz propia para afianzar la comunidad e intervenir en la vida política de España”, ha dicho Lambán.
Precisamente a esos “padres fundadores” del autogobierno aragonés ha querido “venerar” el expresidente, citando a Juan Antonio Bolea Foradada, Gaspar Castellano, Hipólito Gómez de las Roces, Santiago Marraco o José Ángel Biel, entre otros, llamando a “retomar” el camino que emprendieron y aprovechando la cita más aragonesa para reivindicar más financiación y la conclusión de las obras hidráulicas.
Recuerdo a Tomás Solans
“Disponemos del caudal impresionante que atesora esta comunidad: temple, capacidad de pacto y moderación, talento, centralidad para proyectar un futuro, la rasmia en el corazón que siempre nos ha caracterizado y también el inmenso placer de ser una comunidad suave, refinada y seductora en todas las ramas del saber universal”, ha dicho.
Quiso recordar el expresidente a Tomás Solans, fallecido en el día de hoy, al que “el destino le guardó la cruel o feliz paradoja de morir en este día siendo un gran servidor de Aragón”, y felicitó a los condecorados en el Día de Aragón. “Me llena de orgullo esta medalla y me compromete más si cabe a dar hasta mi última gota de sangre (algún glóbulo me tendré que dejar para la quimioterapia) por Aragón”, ha concluido Javier Lambán.
