Feijóo consolida una mayoría absoluta de la derecha pese al hundimiento de Vox

La foto con Puigdemont y el pacto de Pamplona arrebatarían hasta diez escaños a la izquierda

El PP es el único partido que crece en el convulso arranque de la nueva legislatura, según el sondeo de NC Report realizado del 12 al 16 de diciembre, justo en unos días que coinciden con la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de cruzar otras dos líneas rojas en los principios clásicos del socialismo. Por un lado, entregar el Gobierno del Ayuntamiento de Pamplona a Arnaldo Otegi, una demanda que EH Bildu lleva mucho tiempo exigiendo, a cambio de su apoyo en Madrid, debido a las especiales connotaciones que la capital navarra tiene para la izquierda abertzale. El otro salto ha sido admitir que habrá una reunión con Carles Puigdemont, hoy todavía en situación de prófugo de la Justicia española: es una condición que también forma parte del pacto de investidura -la duda es si será antes, como quiere Junts, o después de que se haga efectiva la ley de amnistía, como desea Moncloa.

La encuesta concede a Alberto Núñez Feijóo entre 152-154 escaños, lo que supone ganar 743.561 votos y hasta entre 15-17 escaños respecto a las generales de julio. De este modo, la derecha podría conseguir la mayoría absoluta si hoy se celebraran elecciones, pese a que Vox no detiene su tendencia a la baja. Significativamente, este escenario dominado por el tema territorial, la confrontación, incluso llevada a la calle, no está sirviendo de revulsivo al partido de Santiago Abascal –contra pronóstico, por cierto, ya que hasta ahora este clima siempre les ha favorecido–. Sin embargo, hoy es el PP el que capitaliza el desgaste de los socialistas sometidos a las exigencias independentistas. Vox pierde casi medio millón de votos (416.882) y contaría en el Congreso de 7 a 9 diputados menos que en la actualidad si se abrieran las urnas. Aun así, el crecimiento del PP otorga a la derecha de 176 a 180 escaños, cuando la mayoría absoluta está en los 176 diputados.

En la izquierda, del PSOE saldrían casi seiscientos mil votos, que en escaños supondrían perder entre 1 y 4. En votos, cae menos Sumar que el partido de Pedro Sánchez (428.879), aunque por la ley D’Hont el coste sería mayor en el Congreso, con entre 4 y 6 diputados menos. El balance es negativo para las dos fuerzas de la coalición, con la sorpresa de que ni siquiera la plataforma de Yolanda Díaz, más coherente desde el punto de vista programático con la amnistía y demás puntos de los acuerdos con Puigdemont y Oriol Junqueras, resiste a los efectos del pacto de investidura.

De la letra pequeña de la encuesta, la comparación de los equilibrios dentro del independentismo y el nacionalismo vasco deja como dato más relevante que de los cuatro partidos (ERC, Junts, PNV y EH BIldu) , solo la fuerza de Carles Puigdemont crece algo en votos, es una cantidad simbólica, 36.590 papeletas, pero a tener en cuenta en la batalla de todas las batallas electorales que se prepara en Cataluña para finales del 24. En escaños, los cuatro partidos mantienen su actual representación. También hay elecciones vascas, previsiblemente en marzo, y en la comparativa PNV-EH Bildu, los de Otegi pierden más votos que las siglas que preside Andoni Ortuzar. En estos comicios vascos se medirán dos liderazgos renovados, y después del pacto de Pamplona entre Ferraz y EH Bildu ha subido el interés por la política de alianzas de los socialistas en Euskadi.

Está radiografía nacional, con un PP que se refuerza a costa de las otras tres fuerzas con más representación en el Congreso, está pendiente de ver cómo se traslada a los procesos electorales del 24: vascas, gallegas, europeas y, en principio, también catalanas (aunque estas últimas tienen de plazo hasta febrero del próximo año). A día de hoy, según este sondeo, el PP es la fuerza que mantiene un porcentaje más fuerte de fidelidad de su electorado (96,3%), el más alto de la serie desde las últimas elecciones generales. El PSOE está en el 85%, pero en su seguimiento salta la alarma de que un 4,5% de sus votantes de los anteriores comicios asegura que hoy votaría al PP. En todo caso, la fuga más grande es a la abstención. La fidelidad del votante de Vox alcanza el 81,4%, pero con un 13,4% que dice que hoy votaría a la lista de Feijóo. Mientras que Sumar (76,2%) tiene como principal agujero el trasvase de votos al PSOE (16,5%). Sumar, igual que le sucede a Vox, se enfrenta a un año electoral nada cómodo, y en el caso de la vicepresidenta con el problema añadido del desafío que supone la ruptura con Podemos. Moncloa ha visto esta debilidad y quiere arrebatarle el liderazgo social que Díaz fue capaz de sostener durante toda la pasada legislatura, en una operación que buscar jibarizar a Sumar, igual que ya sucedió con Podemos. El retorno de Irene Montero como candidata a las elecciones europeas tiene efectos en el pulso entre Sumar y Podemos no solo en estos comicios, sino también en los de carácter autonómico, en los que la plataforma de Díaz no está en absoluto consolidada. Internamente, empieza a hablarse cada vez más de las diferencias crecientes con Compromís.

El líder del PP es el mejor valorado

El líder del PP es el que mejor consideración merece, según el sondeo, que le otorga un 4,5 sobre 5; seguido del presidente del Gobierno, con un 4,3; mientras que la líder de Sumar, Yolanda Díaz, logra un 4,0. Santiago Abascal, cabeza visible de Vox, se queda con un 3,4. Por edades, Feijóo logra su mejor valoración (4,6) en el segmento de mayores de 45 años en adelante, un tramo en el que Pedro Sánchez, obtiene buenos porcentajes, aunque se maneja mejor en los perfiles de 18 a 29 años, igual que Díaz.