A los agricultores afectados por las heladas no les salen las cuentas. Con afecciones del 80 al 100%, la mayoría denuncia que los seguros se quedan lejos de cubrir sus pérdidas reales, ya que los históricos rebajan los rendimientos de sus fincas y además, encarecen sus pólizas, lo que unido a una franquicia del 30% les deja con escasas opciones de acabar la campaña en números positivos. Y más con la inestabilidad actual de los mercados y la subida de la energía y los costes.
Los alcaldes de las comarcas oscenses afectadas han elevado este martes sus reivindicaciones al director territorial de Agroseguro, Juan Cruzán, con el que se han reunido en la sede comarcal del Bajo Cinca. El encuentro ha sido cordial, según el presidente anfitrión, Marco Ibarz, que ha agradecido la buena disposición del responsable de la compañía aseguradora. «Siempre da la cara», ha dicho.
El sector tiene claras sus demandas. Los agricultores piden rebajar la franquicia actual, que consideran excesiva, y además, revisar la forma de aplicación de los históricos, que les impide asegurar el 100% de su producción. Agroseguro hace una media de los kilos de los últimos años y con ella, establece la cantidad asegurable, lo que supone que si un productor ha sido duramente castigado por la climatología tendrá una media inferior a la que son capaces de ofrecer sus campos. De media, este año las rebajas han ido del 8 al 10%. La siniestralidad también hace subir las pólizas, que, según explican los productores, se han convertido en el segundo mayor gasto de una explotación, con un pago de entre 4 y 7 céntimos por kilo.
Tras el encuentro, Cruzán ha agradecido el debate así como la oportunidad de explicar cómo se aplican los históricos, al considerar que es un aspecto «desconocido» por algunos productores. También han asegurado que las primas «se han mantenido» a pesar de la siniestralidad del pasado año y ha avanzado que las nuevas peritaciones ya han comenzado.
En el Bajo Cinca, han recibido ya el parte de 4.000 de las 8.000 hectáreas aseguradas, que suponen el 90% de los frutales existentes, y para su peritaje, han desplegado a una veintena de técnicos. Cruzán se ha comprometido a ser «rápidos» en las evaluaciones y efectuar «un pronto pago», mostrándose sensible a la «difícil» situación del productor. También les ha instado a presentar cuánto antes sus partes.
Cambios
Por otro lado, los alcaldes han admitido que las condiciones están recogidas en cada una de las pólizas de Agroseguro, pero han insistido en que se estudien sus reivindicaciones y puedan aplicarse cambios. «Hay que adelantarse a futuras adversidades. No podemos cambiar esta campaña, pero sí las siguientes», ha señalado el alcalde de Belver de Cinca, Javier Carrasquer.
En el Bajo Cinca, al ser la segunda helada consecutiva, los agricultores sostienen que saldrán muy perjudicados en sus históricos (Agroseguro solo retira de la media el mejor y el peor año) y por lo tanto, algunos tendrán dificultades para hacer frente al pago de las siguientes pólizas. «Seremos doblemente castigados, por las pérdidas sufridas y por las penalizaciones del seguro. Las heladas han sido excepcionales y por lo tanto, deberían eliminarse de los históricos», ha señalado el concejal y productor de Zaidín, Joaquín Casadas.
En su caso, los peritos cifraron el pasado año sus daños por heladas en un 29,7%. Con una franquicia del 30%, no cobró ni un euro, pero las pérdidas cuentan para sus históricos, lo que le pasará factura en su próxima póliza, ya que este año vuelve además a tener afecciones incluso mayores. Aun así, al igual que el resto, está de acuerdo en que el seguro es su única arma contra la climatología adversa. «No nos queda otra que asegurar», ha señalado.
Otro ejemplo. También en Zaidín. Un agricultor pagó el pasado año 100.000 euros por su póliza, aseguró 1,2 millones de kilos y un capital de 720.000 euros. Para empezar a cobrar el primer euro, tiene que perder 220.000 euros, atendiendo a las condiciones actuales.
