Pablo Casado traslada al PP en todas las autonomías que copien el ‘modelo Ayuso’

A Pablo Casado la suerte se la está cambiando Isabel Díaz Ayuso. Alrededor de la presidenta madrileña el PP ha construido una euforia casi identitaria, un orgullo de pertenencia que ha resucitado el ánimo ganador de los populares.

El presidente del PP ya cree divisar en el horizonte una opción clara de gobernar porque, ahora sí, ha encontrado un camino alternativo al de Alberto Núñez Feijóo para pasar a limpio su proyecto de «refundación» del centroderecha.

En Génova se ven en Moncloa al calor de las buenas encuestas que manejan en Madrid. «Casado es ya alternativa real a Sánchez y el partido tiene que creérselo y actuar en consecuencia». De hecho, el «efecto Ayuso» entró ayer en el Comité de Dirección que Pablo Casado presidió a puerta cerrada, y ese punto de inflexión, que se anuncia que pueden significar las elecciones de Madrid en el ciclo político nacional, se dejó sentir en el ánimo de la cúpula del principal partido de la oposición.

La orden de Casado al grupo de dirección es que a partir del próximo 5 de mayo el partido tiene que ponerse «en modo precampaña» en clave nacional «porque no se sabe qué va a pasar». La posibilidad de que Pedro Sánchez convoque elecciones es el «runrún» que lleva en circulación prácticamente desde que arrancó la legislatura por la precariedad de los apoyos parlamentarios del presidente del Gobierno. En esta decisión de Sánchez influirá el calendario de reformas y ajustes que pedirá la UE, pero también el resultado de los comicios de Madrid, una vez que la moción de censura de Murcia descolocó todas las piezas del tablero político.