Catorce empresas levantarán el nuevo hospital de emergencias de Madrid

En apenas una semana, el Hospital de Emergencias de Valdebebas podría ver colocada su primera piedra. El proyecto anunciado a principios de este mes por Isabel Díaz Ayuso avanza a pasos agigantados con el fin de materializarse este mismo otoño. De hecho, el anteproyecto del mismo ya está en poder del Ayuntamiento de Madrid, que ha dado su conformidad urbanística, mientras que el Consejo de Gobierno lo aprobará próximamente.

Así lo señala a LA RAZÓN Alejo Miranda, director general de Infraestructuras Sanitarias de la Comunidad de Madrid, que subraya que el proyecto ya ha sido adjudicado a 14 empresas, después de haber sido invitadas un total de 49, dentro del sector de la arquitectura, la ingeniería y la topografía. Miranda explica que, «si bien la Ley del suelo nos permitía hacer una adjudicación por vía de emergencia y a dedo, hemos querido garantizar la concurrencia y la transparencia en el procedimiento de manera absoluta». De hecho, la responsable de elegir los proyectos ha sido una comisión técnica de evaluación de ofertas, formada la semana pasada e integrada «exclusivamente por funcionarios de la Dirección General de Infraestructuras sanitarias que tuvieran titulación de arquitecto o ingeniero superior».

Así, entre estas empresas, «seleccionadas con criterios objetivos», se encuentran varias constructoras, estudios de arquitectura, otras de ingenierías y también una empresa especializada en la analítica del suelo.

Según detalla Miranda, entre otros avances, los estudios topográficos previos realizados en la parcela, de 70.000 metros cuadrados y que se encuentra dentro de la Ciudad de la Justicia, han revelado la existencia de «estructuras subterráneas pertenecientes a la construcción del Instituto de Medicina Legal (IML)», utilizado recientemente como morgue provisional, y «que tenían como objetivo las comunicaciones entre los distintos edificios circulares» de aquel proyecto. Ahora, señala el director general, esos túneles «se van a utilizar para las comunicaciones de suministros entre el IML, los edificios del nuevo hospital y la central térmica que también forma parte del complejo».

Si bien un proyecto como el nuevo Hospital de Emergencias tarda en redactarse unos siete meses, y su procedimiento de licitación abarca entre otros cinco y ocho, ha sido el «interés público» el que ha llevado a la Comunidad de Madrid a acortar al máximo los tiempos. Como explica Miranda, el centro, que contará con cerca de mil camas, áreas de Diagnóstico por imagen, un laboratorio y salas polivalentes, no solo nace para hacer frente a un posible rebrote de coronavirus. «Hablamos de que, además de esta circunstancia, surgirán las habituales epidemias estacionales de gripe y bronquiolitis, de forma que las tres convivirían. La pandemia nos ha hecho modificar la estructura de nuestro sistema sanitario», asegura. De ahí que el modelo de este nuevo centro esté definido por su «versatilidad», de forma que pueda hacer frente tanto a un posible rebrote como a otro tipo de accidentes que, esperemos, nunca tengamos que lamentar.