Un bulo difundido por concejales de Ahora Madrid y cargos de Podemos incitó los disturbios de Lavapiés

A las 21 horas del jueves, el portavoz de Podemos en el Senado, Ramón Espinar, tuiteaba: «Hoy es un día triste en España. No hemos estados a la altura de los Derechos Humanos. Hemos fracasado».

Muere un mantero de una parada cardiaca en Lavapiés

 Dos horas después, Juan Carlos Monedero, fundador de Podemos, lanzaba otro tuit: «Aquí, en Lavapiés, ha muerto esta noche Mame Mbaye, un inmigrante perseguido por la Policía. Cuánto dolor innecesario».

Casi en el mismo instante, desde París donde se encontraba de viaje oficial, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, decía: «Desde el Ayuntamiento investigaremos a fondo lo sucedido y actuaremos en consecuencia».

Más incendiaria, sobre la medianoche, la concejal de Usera y Arganzuela, Rommy Arce, lanzaba: «Lucrecia Pérez, Samba Martine… hoy Mame Mbaye. Los ‘nadie’ víctimas de la xenofobia institucional y del sistema capitalista».

Concejales de Ahora Madrid y líderes de Podemos se hacían eco del bulo de que el joven senegalés Mame Mbaye había muerto tras una persecución policial, o anunciaban que se investigaría la actuación de los agentes, y Lavapiés se convertía en trending topic mientras sus calles se incendiaban con grupos de antisistema quemando contenedores y enfrentándose a la Policía.

La oposición en el Ayuntamiento de Madrid denunció el viernes que los mensajes lanzados en las redes sociales el jueves por la noche «alentaron en cierta manera» los disturbios, en palabras del portavoz del Grupo Municipal del PP, José Luis Martínez-Almeida, quien pidió mayor «responsabilidad» a los ediles del equipo de Gobierno para no sembrar «sospechas» sobre la actuación policial.

En la misma línea, la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, censuró que, en lugar de respaldo del equipo de Carmena, los policías recibieran «sospechas» y sostuvo que, con su actitud, «lo que están haciendo es estigmatizar la labor policial».

De hecho, aunque el bulo quedó desmentido por el atestado policial y los hasta siete testigos que corroboraron que Mame Mbaye se desplomó solo en la calle, en la protesta del viernes por la tarde en Lavapiés, los concentrados gritaban: «Lo han matado, lo han matado».

Víctima del capitalismo

Horas antes, el concejal de Economía y responsables del distrito Centro, Jorge García Castaño, había asegurado que el joven senegalés era una «víctima del sistema capitalista», tras ser interpelado precisamente por el tuit de su compañera de equipo de Gobierno Rommy Arce.

Incluso el concejal de Seguridad, Javier Barbero, tras mostrar su «respaldo» a la Policía y admitir que los agentes no habían intervenido en el fallecimiento de Mbaye, aseguró: «Cuando se viven situaciones de supervivencia pura y dura, permanentemente huyendo de la Policía, afecta a la salud de las personas… es una señal que nos debe hacer pensar».

Ante esta cascada de declaraciones, los sindicatos de la Policía Municipal de Madrid exigieron a la alcaldesa Manuela Carmena que les respalde y anunciaron que estudiarán querellarse contra los políticos que han asegurado que el fallecido era hostigado por los agentes.

Irene Montero, portavoz de Podemos en el Congreso, por ejemplo, se olvidó de los agentes y tuiteó: «Dolor al conocer la muerte de un vecino de Lavapiés. Hay que depurar responsabilidades».

Noche tranquila en Lavapiés

El barrio ha amanecido tranquilo después de una noche que se ha vivido con normalidad tras los últimos disturbios registrados.

Pese al temor de que la manifestación convocada para la tarde de ayer, y que la Delegación de Gobierno en Madrid cifró en 2.500 asistentes, pudiera terminar con disturbios, la protesta, que se convirtió también en un acto de recuerdo del fallecido, concluyó sin incidentes.

Cinco de los detenidos la madrugada del viernes por los altercados pasarán hoy a disposición judicial, en tanto que del otro arrestado, menor de edad, ya se hizo cargo la Fiscalía de menores.