Este viernes se han retomado las actuaciones de reevaluación de los daños que sufren las torres de la Basílica del Pilar, pero habrá que modificar el proyecto de los trabajos y se desconoce cuánto costarán.
Casi dos años después de la caída de los primeros cascotes de una cornisa, las obras de rehabilitación de las torres de la Basílica del Pilar siguen sin una fecha concreta para arrancar. Hoy se han retomado las actuaciones de reevaluación, pero habrá que modificar el proyecto de los trabajos y se desconoce cuánto costarán.
El Ayuntamiento de Zaragoza y el Cabildo han creado una comisión de seguimiento que evaluará de nuevo cuáles son los daños que sufren tres de las cuatro torres para después del análisis poder comenzar a trabajar.
En ella participarán técnicos municipales de Urbanismo, Policía Local y Cultura, personal del Cabildo, así como las comisiones de patrimonio tanto local como provincial. Esta decisión se suma a las distintas medidas que van a conformarse y que se han acordado en las diferentes reuniones técnicas entre la propiedad de la basílica, que es la responsable última de la ejecución de las obras, y el Consistorio zaragozano, que presta su asesoramiento durante todo el proceso.
La redacción final del proyecto y la dirección de obras se ha encargado al arquitecto Javier Ibagüen Soler.
“Hemos solicitado dos estudios básicos de seguridad y salud para que la propiedad preserve la plaza del Pilar, en la medida de lo posible, de las afecciones que puedan conllevar las futuras obras”, ha apuntado el responsable de Urbanismo, Víctor Serrano.
“Es un espacio urbano público de gran tránsito ciudadano, principal foco del turismo de la ciudad y en el que se desarrollan, a lo largo del año, numerosas actividades y eventos”, ha advertido el consejero municipal, “por lo que nuestro interés, y es la sensibilidad con la que lo ha recogido el Cabildo Metropolitano en su planificación, es garantizar el mayor uso posible de la misma, con las menores afecciones y las mayores garantías de seguridad”.
Del mismo modo, el Ayuntamiento va a prestar al Cabildo, que es el propietario del edificio y ejecutor de las obras, “la máxima asistencia técnica y de medios auxiliares para facilitar las actuaciones”, ha afirmado Víctor Serrano, quien ha recordado “la elevada importancia patrimonial, cultural, histórica, turística, religiosa y sentimental del principal monumento de nuestra ciudad”.
EL CABILDO DESEA QUE ALGUNA DE LAS TORRES YA ESTÉ LISTA EN FIESTAS DEL PILAR
El portavoz del Cabildo de Zaragoza, José Antonio Calvo, ha explicado que las obras podrían comenzar con las dos torres más próximas a la plaza y se estudia la posibilidad de acometerlas sin una estructura de andamios.
Además, ha manifestado su deseo de que alguna de las torres pueda estar ya reformada para estas Fiestas del Pilar. “Nos gustaría que estas obras comenzarán cuánto antes. Pensamos que el de hoy es un paso definitivo y ojalá pudiésemos llegar a las Fiestas del Pilar ya cercanas con alguna de estas torres descubiertas. Confiamos en el buen hacer de todos y creemos que el equipo y la colaboración son los adecuados”, ha sostenido.
El coste de las obras todavía no está cuantificado. Las estimaciones que se hicieron en un proyecto anterior hablaban de unos dos millones de euros aproximadamente.
El Cabildo de Zaragoza ha apuntado que son los promotores de estas obras y sufragarán los trabajos con sus arcas, “que vienen de la colaboración de los fieles”. Además, ha añadido que pedirán respaldo económico a las instituciones para llevar a cabo los trabajos, “ya que el Pilar es el buque insignia de la ciudad”.
