El Banco de Alimentos de Zaragoza afronta 2024: «Por primera vez vamos a tener que comprar garbanzos»

La entidad no repartirá el 14% de productos que llegan del Fondo Europeo. La entrada de frutas, verduras, conservas y otros artículos esenciales descendió un 9% el año pasado.

El Banco de Alimentos de Zaragoza tiene previsto adquirir comestibles a lo largo de este año por valor de 800.000 euros, en 2023 destinó a ello 600.000, para compensar la caída de productos que recibe la entidad y que el pasado ejercicio fue ya de un 9%. «Por primera vez vamos a tener que comprar garbanzos, algo impensable hace poco. También queremos garantizar que cada beneficiario reciba dos litros de leche al mes, que no es mucho, pero la pasada primavera lo tuvimos que reducir a un litro», explicó el presidente de la entidad, José Ignacio Alfaro.

Otro problema añadido es que la oenegé, al igual que el resto de bancos del país, ya no va a repartir el 14% de alimentos que provienen del Fondo Europeo de Ayuda para las Personas Más Desfavorecidas (FEAD). Este plan se va a sustituir por el nuevo Programa de Asistencia Material Básica, también conocido como Programa Básico de Alimentos, en el marco del Fondo Social Europeo Plus (FSE+). Una renovación que está prevista que se haga con tarjetas monedero pensadas para usarse directamente en los supermercados que sustituirán al suministro en especie.

Alfaro señaló que está previsto que se pongan en marcha en abril, aunque desconocen los detalles de su funcionamiento, y que acabarán gestionándolas las comunidades a partir ya de 2025.

Lo que está claro es que el balance de 2023 les obliga a tirar más de fondos propios para seguir dando de comer a 23.780 personas, un número similar al de 2022, a través de las 143 entidades sociales con las que trabajan. Las conservas, pasta y otros artículos procedentes del fondo europeo FEAD cayeron en picado un 32,5%, de 676.000 kilos en 2022 a 456.000 el año pasado. Las entregas de productos por parte de los mayoristas de Zaragoza también disminuyeron un 25,4% (de 460.000 kilos a a 343.000) y las frutas y hortalizas procedentes del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), un 16,3% (de 601.000 kilos a 503.000).

En total, el año pasado el Banco de Alimentos de Zaragoza repartió 3.237 toneladas de alimentos, un 14% menos que el anterior, lo que supuso una media de 135,44 kilos por personas frente a los 154,26 de 2022.

Polémica por el nuevo programa

La consejera de Bienestar Social y Familia, Carmen Susíncriticó este lunes el descenso de la ayuda del Gobierno central a los bancos de alimentos con motivo de su visita a las instalaciones del de Huesca. A través de una nota de prensa, explicó que las tarjetas monedero del nuevo Programa Básico de Alimentos está previsto que se destinen solo a familias con hijos a su cargo, lo que supondría que se atendiera a unos 700 hogares, por lo que «habrá muchos colectivos que se quedarán fuera de la ayuda alimentaria de la Unión Europea».

Un momento de la visita de la consejera Carmen Susín al Banco de Alimentos de Huesca
Un momento de la visita de la consejera Carmen Susín al Banco de Alimentos de Huesca DGA

Susín reprochó que la «incertidumbre» que rodea a la puesta en marcha del nuevo Programa Básico de Alimentos está haciendo vivir un «momento crítico» a los bancos que hasta ahora lo llevaban adelante. Subrayó que estas entidades han avisado de que el nuevo sistema de tarjetas monedero puede suponer un «cierre masivo».

Por ello, recordó que la DGA concede por primera vez este año ayudas directas a los bancos: 100.000 euros al de Zaragoza y 50.000 a los de Huesca y Teruel.

Mientras, desde el Ministerio de Derechos Sociales negaron cualquier recorte a estas organizaciones. Confirmaron que las tarjetas monedero se lanzarán el próximo abril «en un modelo de transición que se llevará a cabo hasta diciembre». En enero de 2025 pasará a ser responsabilidad de cada autonomía administrarlas en función de las líneas que marca la Unión Europea al respecto: «centrar la ayuda especialmente en familias con menores a su cargo, para llevar a cabo el objetivo de lucha contra pobreza infantil», señalaron.

Fuentes ministeriales recordaron que las transformación del  programa FEAD se acordó por unanimidad en el Consejo Interterritorial de diciembre de 2021. Defendieron que este cambio pretende «estigmatizar» menos a las familias que necesitan esta ayuda y posibilitar que cada hogar reciba de forma directa más cantidad de dinero para la compra de alimentos.

Desde el Ejecutivo central no concretaron el número de familias aragonesas que podrían recibirlas, pero sí señalaron que las autonomías «disponen de recursos liberados de su tramo autonómico y pueden usarlos para complementar el tramo estatal si detectaran necesidades no cubiertas o colectivos sin protección». «El Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 sigue financiando a la Federación Estatal de Bancos de Alimentos, así que no hay ningún abandono por esta parte», concluyeron.