Casademont Zaragoza ha logrado remontar los nueve puntos de desventaja del partido de la ida frente a Movistar Estudiantes y jugará la semana que viene las semifinales por el título
Una vez más, Casademont Zaragoza lo ha vuelto a hacer y sigue apuntado a las grandes citas: disputará las semifinales por el título liguero. Cuando se lo jugaba todo, no ha fallado. Con confianza, garra y un juego brillante, ha demostrado que siempre, siempre, hay que creer en este equipo y que la derrota del miércoles, además de ser un pequeño traspié, está totalmente superada. Diez puntos de ventaja necesitaban las rojillas para llevarse la eliminatoria y dejar fuera a Movistar Estudiantes. Gracias a un duelo impecable, aunque sufrido, ha terminado venciendo por 62-47 consumando la hazaña, otra más a la lista.
Así pues, con total merecimiento, Casademont Zaragoza estará la próxima semana en las semifinales del playoff de la Liga Femenina Endesa. Su rival se conocerá mañana y será el vencedor de la eliminatoria entre Valencia Basket o IDK.
Tras el 74-65 de la ida, todo estaba por decidir en Zaragoza. Nueve puntos no eran nada para un equipo acostumbrado a las gestas históricas. En un partido de 80 minutos, la segunda parte se jugaba en casa, en el Príncipe Felipe. Con la Marea Roja apretando desde antes del arranque, Casademont Zaragoza buscaría limpiar la imagen mostrada en el Antonio Magariños y consumar la remontada para continuar con su sueño.
Autocrítica hecha y mentes renovadas. Este sábado 27 de abril llegaba el día decisivo. Para la cita, Carlos Cantero repetía el quinteto inicial con Mariona Ortiz, Leo Fiebich, Atkinson, Vega Gimeno y Diallo en la cancha.
Tras la entrega de galardones a Mariona Ortiz y Leo Fiebich por parte de la Federación Española de Baloncesto (quinteto ideal y MVPs), el balón se ponía en juego con la primera posesión para las rojillas. La primera canasta la anotaban las visitantes, pero Casademont no dejaría que la historia, ni los errores, de la ida se repitieran. 10 minutos casi perfectos permitían acabar el primer cuarto ya con la renta suficiente para alcanzar las semifinales (17-7).
En el parqué la actitud era totalmente diferente, una que sí caracteriza a este grupo, aupada por un gran ambiente en el Príncipe Felipe. También ayudaba la falta de acierto de Movistar Estudiantes, a quien, todo lo que le entró en su campo, no lo hacía en el Felipe. Del 0-2 se llegaría hasta el 9-2, gracias a las canastas de Atkinson y Diallo. Las de David Gallego no encontraban los lanzamientos cómodos ante la buena defensa maña y sólo sumaban mediante tiros libres. Petra Holesinska se encargaba de ampliar el marcador hasta el final con dos triples consecutivos y un robo que acabaría en canasta.
Seguía poniéndose de cara la contienda, afirmando el gran comienzo del equipo de Cantero. Serena Geldof y Nerea Hermosa participaban, Leo Fiebich se enchufaba y la renta iría aumentando, aunque el conjunto estudiantil trataba de no descolgarse a través de las acciones de Mawuli, aunque esta se mostraba mucho menos acertada que el miércoles. Casademont se gustaba y el ataque fluía de todas las formas, independientemente de las jugadoras que estuvieran en la pista, con una destacada Petra, que otro día más gozó de su triple sobre la bocina. De esta forma, incluso sin la anotación de Vega o Mariona, la ventaja era de más 16 para las zaragozanas al descanso (35-19).
SUFRIMIENTO EN LA SEGUNDA PARTE
Cantero y sus pupilas no se conformaban y buscaban encarrilar cuanto antes el choque. Por lo que pudiera pasar. Comenzaba bien el tercer cuarto con los primeros puntos para Mariona Ortiz y la capitana, y más de una descomunal Tanaya. Pero, llegaría el momento en el que Casademont Zaragoza se bloqueaba y encajaría un parcial de 0-9, pasando de un 44-23 muy cómodo a un 44-32, que metía el miedo en el cuerpo y provocaría el tiempo muerto del técnico madrileño. En el momento más necesario aparecía Vega Gimeno con uno de sus triples que levanta a las gradas y sellaba el 47-34. Un tiro libre para Mawuli y una canasta en suspensión de la ‘4’ rojilla sería lo último del cuarto. El marcador se mantenía en un más 16, 49-35.
Los diez minutos restantes iban a ser muy largos. Sobre todo tras el comienzo de las de David Gallego, que se ponían a diez en un instante. Cada ataque y cada defensa valía oro, y cuando en la faceta ofensiva le costaba a las aragonesas, sumando sólo por medio de la alemana, el desgaste en defensa era máximo. Así, conseguía mantener la distancia, que a falta de tres minutos, era de 14 (57-43). Una extraordinaria canasta de Atkinson y otra de Vega Gimeno daban algo de tranquilidad. No había tiempo para más y con el 62-47 final, Casademont Zaragoza se planta en las semifinales por segundo año consecutivo.
