El lunes se reunirá nuevamente la Asamblea para una segunda votación
La Asamblea Regional de Murcia ha rechazado hoy por 24 votos en contra y 21 a favor la investidura de Fernando López Miras, candidato popular, como presidente de la Asamblea.
Tal y como habían anunciado, los diputados de Vox han votado «no» imposibilitando así la elección del candidato mayoritario, por lo que la siguiente votación se tendrá que celebrar el lunes, tal y como ha convocado la presidenta de la Asamblea antes de levantar la sesión.
López Miras tendrá una segunda oportunidad para ser investido presidente el lunes, 10 de julio, a las 11:00 horas, cuando se repetirá la votación. En esta ocasión, para ser investido como presidente necesitará mayoría simple, esto es, más «síes» que «noes», con lo que de obtener finalmente la abstención de Vox, el diputado del PP podría repetir como presidente de la Comunidad. De hecho, con que se abstuvieran cuatro diputados de Vox, de los nueve que tiene, sería suficiente.
Los de Vox exigen a López Miras participar en el Gobierno de Murcia, como ha ocurrido en el pacto de Gobierno de la Comunidad Valenciana, si bien los populares le muestran el ejemplo balear, en el que la abstención de Vox propició la investidura mediante un pacto de gobernabilidad que los de López Miras le han ofrecido a Vox por activa y por pasiva.
En el debate de hoy, la oposición de PSOE y Podemos se refería a los desencuentros de forma más gráfica: «Poltrona y coche oficial».
Durante el pleno de investidura y en la última de sus intervenciones, López Miras, sabedor de que el voto de Vox iba a ser negativo, les ha recriminado que «la sociedad murciana no puede permitirse un bloqueo institucional porque los ciudadanos no tienen entre sus preocupaciones si la clase política es capaz de llegar a un acuerdo, dan por hecho que es nuestra responsabilidad».
Ha recordado que la sociedad, «con una contundente mayoría», ha votado la opción que él representa. El candidato a presidente dice estar dispuesto a blindar el trasvase Tajo-Segura y exigir una financiación justa. También a apostar por la calidad de la enseñanza donde sean los padres los que decidan el modelo educativo. «Desde la coincidencia con las ideas, no en todas, pero sí con un número suficiente, está en nuestra mano que no pase un día más sin que la Región de Murcia empiece a aprovechar las oportunidades».
Se ha dirigido a los diputados de Vox para ofrecerles un acuerdo programático «con actuaciones que no tienen sentido que no salgan adelante» y les ha asegurado que «sus propuestas estarán siempre en la hoja de ruta del gobierno».
López Miras ha apuntado que «si no hubiera elecciones el 23 de julio, la Región de Murcia tendría un gobierno funcionando la semana que viene» y le ha pedido al portavoz de Vox, José Ángel Antelo, que le diga «a qué hora y dónde nos vemos esta tarde», pero le ha pedido que «no supediten la negociación a los sillones» porque si no «solo habrá un beneficiario, Pedro Sánchez».
Antelo, por su parte, ha mostrado la «incoherencia» de Núñez Feijóo «quien dijo que Vox no podía entrar en el gobierno de Extremadura porque tenía el 8 por ciento, mientras que sí era lógico que lo hiciera en la Comunidad Valenciana porque tenía el doce por ciento. Pues bien, en Murcia tenemos el 18 por ciento». El de Abascal reprocha al PP que no cumplía los pactos y ha enfatizado que «para que los compromisos se cumplan, Vox tiene que estar en el Gobierno».
Le ha dicho a López Miras que los murcianos «no les han dado la mayoría absoluta porque no tienen la confianza absoluta» y que «usted mismo espera que los temas del agua los lleve Abascal y no Núñez Feijóo después del 23J».
Desde la oposición, la representante de Podemos en el grupo Mixto, María Marín, se ha referido al aspirante a presidente juntando los apellidos de los líderes de PP y Vox y así le ha dicho a «López-Antelo» que el precio del «pacto oculto entre PP y Vox que le han redactado los poderes fácticos es el Mar Menor» y le reprocha haberle dado ya la Presidencia de la Comisión de Agricultura a Vox.
Desde el PSOE, José Vélez ha acusado al presidente en funciones de «hacer una pantomima» porque «viene aquí a decir que le votan en contra, y así esperaremos hasta después de las elecciones generales, y será entonces cuando sus amigos de Vox le hagan presidente de la Región». Y ha insistido en que «el precio de su sillón lo van a pagar las mujeres, los servicios públicos, el Mar Menor, los jóvenes, los mayores, los LGTBI…».
