El estadounidense Larry Shy se ha vuelto conocido en redes por su admiración hacia nuestro país y su curioso tatuaje del logo de El Corte Inglés
«Mirad vuestro clima, vuestra comida, vuestras olivas y el aceite, vuestro queso, vuestra carne (la mejor, junto a la argentina); vuestra historia, ligada inevitablemente a la cultura culinaria», así reza uno de los fragmentos de la declaración de amor a España de Larry Shy, un estadounidense que reside en Michigan pero adora nuestro país, y adquirió cierta popularidad en redes la semana pasada cuando se viralizó el curioso tatuaje que lleva en el brazo.
«Estoy en Estados Unidos de intercambio y me ha preguntado un americano en una tienda que si soy de España», explicaba en Twitter el domingo pasado la murciana Merce Escobar. «Le he dicho que sí y me ha enseñado esto», apuntaba antes de revelar en una foto el tatuaje de Shy, compuesto por múltiples elementos de la cultura española, como la rojigualda, un toro, las palabras ‘Madrid’ y ‘Tapas’, pero, sobre todo, el que acaparó toda la atención de los internautas: el logo de El Corte Inglés
No contento con la popularidad que adquirió después del tweet, Shy se abrió él mismo una cuenta en la conocida red social para poder ver «lo mucho que todo el mundo reconoce mi amor por España», y explicó que fueron sus amigos residentes en el país ibérico quienes le avisaron de que su brazo se había hecho viral. «Estoy sorprendido de la cantidad de personas que han visto esto ahora», escribió.
Carta de amor a España
Después de una semana posteando fotos y recuerdos varios de sus viajes a la Península, Shy sorprendió a todo el mundo este viernes con una suerte de carta de amor a España, en la que lamentaba que muchos habitantes de nuestro país no reconozcan lo mucho que tienen, del mismo modo que él, de niño, no disfrutó del talento de Michael Jordan porque jugaba en los Chicago Bulls, mientras que él era fan de los Detroit Pistons.
En la misiva, Shy, que ha viajado en múltiples ocasiones a España, destaca sobre todo la gastronomía e historia de ésta, y recorre una por una las principales ciudades de la geografía nacional apuntando sus virtudes: desde Burgos, con su «increíble cordero»; Segovia, con «el mejor cochinillo del planeta»; la increíble paella valenciana; los «asombrosos edificios de Barcelona»; la ciudad gótica y barroca de Toledo; la «majestuosa» Alhambra de Granada; y, por supuesto, Madrid, «la ciudad con más bares del mundo».
Otros aspectos que destaca de nuestro país es el entero mes de vacaciones del que disponemos por ley, las cuatro denominaciones de origen del ibérico, el vino de la Rioja, la belleza del País Vasco, el carnaval de Tenerife, la incansable fiesta en Ibiza, el valor de una buena siesta, la estrella Galicia, el mejor partido de fútbol del mundo (Barcelona – Real Madrid) y la «clase que desprende» ver una tarde de domingo a una pareja anciana, agarrada del brazo, bien vestida, como si fueran a la iglesia, caminando calle abajo sin motivo.
