Aragón fue la comunidad donde más subió el precio de la vivienda en 2022

Aragón cerró el 2022 como la comunidad donde más subió el precio de la vivienda. En la comunidad, comprar un piso es hoy un 12,5% más caro que hace un año frente al 8,8% nacional, a pesar de la subida de los tipos de interés y del euribor, que ya rebasa la tasa del 3%, según los datos de la tasadora inmobiliaria Tinsa. El incremento de los precios y el repunte de la inflación tampoco han hecho mella en los compradores aragoneses que tienen que desembolsar 96.250 euros al mes de media si quieren adquirir un inmueble de 7 metros cuadrados en Aragón frente a los 84.700 que costaba al cierre de 2021. Por quinto trimestre consecutivo, todas las regiones registran incrementos de precio en el último año, destacando el impulso de Aragón (+12,5%), Cantabria (+11,2%), Asturias (+10,3%) y Comunidad de Madrid (+8,9%).

Pero si hay una provincia en la que más ha repuntado el coste de la vivienda fue en Zaragoza, con un incremento del 13,1%, convirtiéndose así en la que registró una mayor escalada de precios. Los aumentos más acusados a nivel provincial en el cuarto trimestre del año se recogen en Zaragoza, Cantabria, Asturias y Albacete, por encima del 10% interanual. En el caso de la capital, el aumento es de casi el 11%, por lo que adquirir un piso de 70 metros cuadrados en Zaragoza cuesta ya 115.850 euros de media. Las ciudades doinde más creció el precio, por encima del 10%, son Zaragoza (10,9%) y San Sebastián (10,8%), Cádiz (9,3%), Madrid (9,2%) y Las Palmas de Gran Canaria (8,9%). Pese a ello, figura como la gran ciudad española en la que es necesario un menor esfuerzo para acceder a un inmuebles, ya que cuatro de las seis ciudades principales destinarían más del 35% de su renta al pago de una hipoteca con Barcelona a la cabeza con un 45,5% de esfuerzo y Madrid (un 43,5%), seguidas de Málaga (40,7%) y Sevilla (36,6%). Por debajo del 35% están Valencia (31,4%) y Zaragoza (29,2%).

Los pisos por barrios

El barrio de Zaragoza que encabeza el ránking de precios es el Centro, donde adquirir una vivienda de 70 metros cuadrados cuesta hoy 138.180 euros de media (1.974 euros por metro cuadrado) frente a los 128.730 euros de hace un año. Sin embargo, no es el distrito más inflacionista dentro del sector inmobiliario. En esta clasificación, La Almozara presenta una mayor escalada de los precios, con un 17,1% de media hasta alcanzar los 1.594 euros de media por metro cuadrado, según el informe de Tinsa, que la sitúa como la zona con mayor rentabilidad inmobiliaria. Le sigue muy de cerca el barrio de Delicias, el más grande de la capital aragonesa, con un repunte del coste del 17%. Hoy comprar allí un piso cuesta 103.600 euros. Torrero La Paz y los barrios rurales del norte de Zaragoza también registran importantes subidas que rozan el 10% respecto al pasado año.

Los incrementos más tímidos de precios de la vivienda se registran en la margen izquierda de Zaragoza, con un alza del 4,6% en el último año, seguido del Casco Histórico, con un 5,3%, y Las Fuentes (5,4%), que registra el precio del metro cuadrado más bajo (junto a los barrios rurales del oeste), con 1.275 euros por metro cuadrado.

Tendencia al estancamiento

El informe que Tinsa, publicado este viernes refleja que en 2022 la demanda ha permanecido activa a través de la canalización de los ahorros de los hogares residentes, por un lado, y de la recuperación de los niveles de compraventa extranjera previos a la pandemia, por otro. Pese a ello, la demanda ha estado limitada por la incertidumbre en los costes de construcción, el incremento del coste de la financiación y la inexistencia de suelo urbanizable suficiente en las zonas en que se acumula la demanda, por lo que «los precios han continuado tensionados». Pese a ello, la subida de precios es «coherente» en un entorno inflacionista como el actual.

Para 2023 su informe apunta a una moderación de la demanda, consecuencia de la combinación de una tasa de inflación todavía alta, que erosiona el poder adquisitivo de los hogares, y del cambio en la política monetaria del BCE, que encarece la financiación, factores ambos que dificultan el acceso a la vivienda. Aun así, indica que el entorno inflacionista puede continuar favoreciendo la canalización de ahorros hacia el producto residencial, de forma que las compraventas «no se desplomarían, sino que se mantendrían en niveles cercanos a los del último año». En este escenario, la limitación de la oferta mantendría el tensionamiento de los precios al alza, si bien tenderían a la estabilización a medida que se modere la demanda.

Huesca y Teruel tienden a la contención

Las provincias de Huesca y Teruel han registrado incrementos de precios de la vivienda mucho más discretos que Zaragoza, de forma que en la capital altoaragonesa comprar un piso cuesta un 7% más que hace un año, mientras que en Teruel el alza ha sido del 6%. La provincia de Madrid, con un aumento del 8,9% interanual, contabiliza un crecimiento trimestral del 1,4% y la de Barcelona, con un 5,9% interanual, refleja una variación de 1,1% más en el cuarto trimestre. En Madrid capital los precios de la vivienda subieron este año un 9,2% y en Barcelona, un 4,7%, aunque los mayores incrementos por capitales se produjeron en Zaragoza y San Sebastián con 10,9% y 10,8%, respectivamente. Tinsa destaca que la capital que más se acerca a los máximos de la burbuja es Palma de Mallorca, con precios de la vivienda tan solo un 1% por debajo, seguida de San Sebastián (9,7%), Madrid (11,2%) y Málaga (14,8%), además de Ceuta y Melilla. En el extremo opuesto, las capitales que más se alejan de sus máximos históricos son Lérida, Ciudad Real, Soria y Segovia.