Llega el verano, y con él los viajes en coche. Es en esta época del año cuando más vehículos circulan por las carreteras españolas. En 2021 se produjeron alrededor de 4.750.000 de desplazamientos, y en el presente curso se espera que esa cifra sea aún mayor, ya que será el primer verano en dos años sin apenas restricciones por la pandemia del coronavirus.
Es tiempo entonces de hacer la maleta, de disfrutar y de desconectar. No sin antes realizar las comprobaciones pertinentes para tener un viaje de lo más seguro y sin sobresaltos. Además de revisar los elementos indispensables del coche, también hay que llevar ciertos documentos imprescindibles en el coche, ya que de no hacerlo las sanciones pueden ser importantes y fastidiar por completo el verano.
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Del mismo modo que hay que llevar el Documento Nacional de Identificación (DNI) por la calle, es primordial ir acompañado del carnet de conducir. Aunque las autoridades pueden comprobar si el permiso está vigente a través del DNI siempre es recomendable tenerlo en la cartera. En caso de tenerlo caducado, la sanción es de 200 euros y no implica pérdida de puntos. Cabe recordar que conducir sin carnet de conducir es un delito sancionado con hasta 500 euros de multa y la retirada de 4 puntos.
Hace un par de años, la DGT lanzó su propia aplicación con la que poder llevar el carnet en el móvil, sin necesidad de llevar el documento físico. Además, a través de esta app se pueden realizar diferentes gestiones como recurrir o pagar multas o guardar los papeles del vehículo.
Al volante es también obligatorio tener actualizados el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) del coche. En el caso de tener la ITV fuera de vigencia, la sanción sería de 200 euros, mientras que en el caso del permiso de circulación, 500 euros.
La mayor sanción
Tener un seguro es indispensable a la hora de circular. Con su contratación se cubren las reparaciones o indemnizaciones que se puedan ocasionar a vehículos de terceros implicados en un accidente de tráfico. Es casi tan importante como el propio carnet de conducir. De hecho, la DGT impone una de las multas más altas por circular sin él. Su cuantía puede oscilar entre los 600 y los 3.000 euros. No obstante, llevar los papeles del seguro no es obligatorio, pues las autoridades pueden comprobar su vigencia a través de la documentación del vehículo.
Durante el año 2020, en España se contabilizaron 3.877.297 de multas, según un estudio de Automovilistas Europeos Asociados (AEA).
