Trump destituye a John Bolton, el tercer asesor de seguridad de su mandato

Donald Trump ha destituido este martes al asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, un halcón del expresidente George Bush hijo. El mandatario estadounidense ha anunciado en Twitter el cese de una pieza clave de su Administración. Se trata del tercer asesor de Seguridad Nacional destituido por el presidente de EE UU, que en su mensaje en la red social sostuvo que «discrepaba profundamente con muchas de sus propuestas, así como lo hacían otros miembros de la Administración». «Agradezco mucho a John su servicio», ha asegurado el presidente, que ha prometido anunciar a su sucesor la próxima semana.

Bolton ha refutado la afirmación de su jefe de que había sido despedido aclarando que le ofreció su dimisión en la noche del lunes, a lo que Trump le contestó, según el ya ex asesor de seguridad: “Hablémoslo mañana”. Bolton debía de comparecer esta tarde ante la prensa en la Casa Blanca junto al secretario de Estado, Mike Pompeo, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin. El anuncio de Trump a través de Twitter se produjo menos de dos horas antes de esa rueda de prensa.

En declaraciones muy breves a periodistas, la secretaria de prensa, Stephanie Grisham, dijo que el tuit «lo decía todo». «No le gustaban muchas de sus políticas. No estaban de acuerdo”, zanjó la portavoz del presidente.

Las desavenencias entre Trump y Bolton, uno de los nombres más significados en la fracasada invasión de Irak por parte de George W. Bush, y partidario de una política exterior dura, han quedado de manifiesto en los últimos meses, principalmente en lo tocante a Irán y Corea del Norte, pero también sobre Afganistán. Bolton defendía la acción militar contra Corea del Norte y abogaba por liquidar el acuerdo con Irán. El hasta ahora asesor, se oponía al encuentro que Trump pretendía celebrar con los talibanes en Camp David y que anuló en el último momento, lo que podría haber sido la gota que colmara el vaso en sus desavenencias con el mandatario.

También habían sido palpables su diferencias con Pompeo, al que acusaba privadamente, según informan los medios estadounidenses, de gastar mucho tiempo en perseguir su propia agenda y sus ambiciones políticas. El duro belicista que es Bolton había declarado recientemente que no quería aparecer en televisión para defender algunas de las posiciones de la Administración -particularmente las referentes a Rusia y Afganistan-.

Antes que Bolton, desde enero de 2017, ocuparon el puesto Michael Flynn y Herbert McMaster. En el caso de Flynn, su dimisión llegó después de que la prensa revelara que tuvo contactos con el Kremlin y que mintió al respecto a altos cargos del Gobierno. Por su parte, la salida del general Herbert McMaster en marzo de 2018 se produjo en medio de una crisis de Gobierno que culminó el giro radical de la Administración Trump.

Diferentes fuentes recogidas por medios de comunicación señalaron que, bajo Bolton, el Consejo de Seguridad Nacional se había convertido en una entidad separada dentro de la Casa Blanca y que Bolton operaba de manera separada al resto de la Administración, sin acudir a las reuniones y promoviendo sus propias iniciativas. Una fuente de la Casa Blanca comentó a la cadena estadounidense CBS News que Bolton tenía «sus propias prioridades». «No preguntaba al presidente cuáles eran sus prioridades. Son las prioridades de Bolton».

Bolton se erigió como una de las voces más críticas contra Nicolás Maduro. El ya exasesor de Seguridad fue considerado un hombre clave junto con Pompeo en los esfuerzos del Gobierno de Trump para derrocar a Maduro. Sin embargo, el mandatario también le reprochó el fracaso en su estrategia respecto a Venezuela.