Casado: «El PP sigue siendo la casa de los votantes de centroderecha»

Haciendo uso de la jerga futbolística, Casado ha inyectado moral los responsables del PP en Valencia. A pesar de los resultados de las elecciones autonómicas de 28-A, que dieron el triunfo al tripartito de izquierdas en la Comunidad Valenciana, y al CIS que le otorga la Alcaldía de la ciudad a Compromís, el presidente ‘popular’ ha animado a sus compañeros: «Tenemos que volver a dar lo mejor en el campo».

«Hay que salir a ganar», ha reiterado su exigencia en todas las ciudades por las que ha pasado y ha recordado que el «votante siempre tiene la razón, como el cliente» por eso, «hay que dirigirnos a él y decirle que este partido sigue siendo su casa» una casa que ha descrito como la «de los votantes de centroderecha».

Casado ha tildado al PP como un partido volcado en las personas mayores, en los jóvenes y en las familias, y se ha distanciado de las formaciones que imponen «la lengua en la que la gente tiene que hablar o a qué dios debe rezar».

En su visita a Valencia el responsable nacional del PP ha acudido hasta la imagen de la Virgen de los Desamparados y ha dado un paseo hasta el Ateneo de Valencia junto a la presidenta del PP de la Comunidad Valenciana, Isabel Bonig; la candidata a la Alcaldía de la capital del Turia, María José Catalá; y el número dos de la lista europea, Esteban González Pons.

Entre sus argumentos contra los que han podido perder la confianza en el PP, Casado ha recordado que ningún candidato «tiene que pagar por lo que hizo un antecesor suyo». Acto seguido ha aclarado que el 26-M «tenemos una oportunidad de hacer historia» porque «votar es gratis pero el resultado», sobre la nueva situación del Gobierno de Sánchez «puede ser carísimo».

Ha solicitado también «aglutinar esfuerzos» para gobernar en alcaldías y autonomías para que los populares puedan hacer «contrapeso» y «no dar carta blanca» al presidente del Gobierno.

Precisamente, para evitar el avance del izquierda, la presidenta del PP en la Comunidad Valencia, Isabel Bonig, ha confirmado que su partido «va a ser la barrera frente al sectarismo y la confrontación en los ayuntamientos».

Bonig indicó que la «primera gran remontada del PP empezó con la conquista de los ayuntamientos. Después se conquistó la Generalitat y luego el gobierno de España y eso va a volver a pasar. Nos costará un poco más, pero llegaremos más fuertes y aprendiendo de los errores cometidos. Será de nuevo una mujer en Valencia quien lo empiece».

Para la líder ‘popular’ de la Comunidad «la grandeza de este partido es que somos como un árbol con raíces fuertes, con conocimiento de la tierra. No pasaremos, estamos en la tierra, conocemos la tierra y no somos sectarios ni dogmáticos. Somos un partido abierto, reformista, combativo, presente y jamás ausente. Transformamos la Comunidad Valenciana de norte a sur, y devolvimos la ilusión por el futuro, siendo el partido de las soluciones. Quien ha dado esperanza y trabajo a los parados ha sido el PP. Por eso nadie nos tiene que dar lecciones de superioridad, ni una. Tampoco en la defensa de la democracia y de la igualdad».

María José Catalá ha anunciado que la ciudad de Valencia requiere una «segunda transformación» que la lleve a «las más altas cotas de gloria» para la que «solo hay una receta: una mujer del PP». «Así llegó donde llegó y llegará donde tenga que llegar», ha indicado en recuerdo de la ex alcaldesa Rita Barberá.

«No queremos que nos criminalicen por elegir concertada, por querer estudiar en castellano y por querer conducir en coche», insistió Catalá, quien ha expuesto: «Sabemos que ellos son pocos, y nosotros somos más. Nosotros somos muchos más».

El número dos del PP a las elecciones europeas, Esteban González Pons, ha descrito que el PP es «el gran partido del centroderecha, por ese orden, primero centro y luego derecha, primero centro reformista y luego derecha moderada».

El portavoz de los populares en Europa ha arremetido con dureza contra el ex presidente de la Generalitat Catalana Carles Puigdemont, al que tildó de «cobardica de marca mayor» y ha vaticinado que no estará en el Parlamento Europeo porque «cuando vaya a recoger el acta lo va a detener la Guardia Civil». Por último, ha destacado que el nacionalismo «es el primer peldaño de la escalera del autoritarismo».