Fernando Savater: «Hoy quien está gobernando el país es el PSOE de garrafón»

ETA quiso matarlo y asesinó a muchos amigos suyos. Quizá sea la elegancia lo que le impida recordárselo al socialista Ander Gil cuando escribió: «Y fueron a agitar el odio a Alsasua los que nunca tuvieron que mirar bajo su coche»

P. Llegó a Alsasua desde su casa, en San Sebastián. ¿Les tiraron piedras? Ahora lo cuestionan.
Sí, había un grupo muy agresivo, berreando, que lanzó alguna piedra. Pero los que no hicieron nada eran más. Lo que me molesta es que nadie ha recogido lo que allí se dijo: que queremos una España y una Europa en las que a los ciudadanos no se les pregunte por sus ideas o su origen, sino si estás dispuestos a aceptar las leyes comunes y avanzar con el resto.
P. Su diario, ‘El País’, no le citó
Me ha extrañado: el resumen de lo que habían dicho las otras dos personas [Albert Rivera y Beatriz Sánchez Seco, víctima de ETA] era malo y el mío, inexistente. (Ríe). A mí me gusta que mi periódico dé las cosas bien, y no se apuntó un tanto.
P. Le pregunto por Ander Gil….
No creo que tenga la entidad suficiente como para discutir sobre él. Pero es imposible que no sepa lo que dice. Listo no parece, pero tan bruto como para acusar a Ortega Lara o a una chica a la que con cinco años le pusieron una bomba que mató a su padre de que no saben lo que fue ETA… Luego han intentado arreglar la barbaridad.
P. Bueno, Grande-Marlaska dice que ustedes generaron crispación.
Eso ya sí me ha parecido sorprendente. Que alguien inteligente, que ha sido importante en la lucha contra el terrorismo, diga que no se debe ir a los sitios en los que uno va a crispar… La crispación la pone el otro. Esto es como los que justifican una violación con que la chica llevaba la falda un poco corta e iba provocando. Oiga, la chica llevaba lo que le daba la gana y el violador no tenía que meterse con ella. Nosotros fuimos allí a hacer un discurso civilizado. Si alguien lo toma como una provocación o un insulto, que se lo haga mirar. Que me diga el ministro qué actitud provocativa hemos tenido frente a nadie.
P. Según Margarita Robles, todos sabían a qué iban allí.
Madrugamos para molestar a Josu de Mondragón, claro. (Ríe). Esas cosas las dicen intentando arreglar un roto con un descosido.
P. ¿Y a qué lo atribuye?
Con este Gobierno estoy decepcionado desde que iban a convocar elecciones y no lo hicieron. Es un engaño flagrante: todo el día hablando del derecho a decidir y aquí sólo van a tenerlo los catalanes. (Ríe). El Gobierno gobierna gracias al señor Iglesias y al señor Torra, y quieren tirar para delante. Será un Gobierno legal por las vueltas que tiene la ley, pero no está representando la voluntad popular. Manda un señor al que no sólo no han votado ahora, sino al que, cuando se votó, tampoco le votaban.
P. ¿Cuántas veces le han acusado de provocar? Usted fundó ‘Basta Ya’.
Ya, a mi edad, me gustaría provocar algo más… (Ríe).
P. La provocación consiste en que un no nacionalista no debería exhibirse en terreno nacionalista…
Claro. Y para ir a la Línea de la Concepción habrá que pedir permiso a las bandas de narcos.
P. ¿Qué le parece el pacto Sánchez-Barkos para traspasar el área de tráfico a la Policía Foral?
No es un tema administrativo. Va más allá: quitar a la Guardia Civil por ser un elemento vertebrador.
P. ¿De qué es símbolo Alsasua?
Es símbolo de una dejadez de funciones. Alsasua es una población como cualquier otra que está colonizada por el miedo a desagradar a un grupo de indeseables. En Alsasua vive gente normal que está harta de ellos y agradece que alguien les vaya a echar una mano. En el País Vasco hemos tenido muchas alsasuas, en las que era mejor que no te vieran comprando el periódico. Alsasua es símbolo de eso, y de lo que pasa en Cataluña… y de la idea de que mejor es mirar para otro lado. No molestar. Es el error fundamental de la política actual: querer contemporizar con quienes quieren lo contrario, imponerse a los demás.
P. ¿Sigue situando al PSOE como un partido constitucionalista?
Quiero pensar que sí. Hoy quienes están gobernando el país son PSOE, pero PSOE de garrafón. Hay otros que todavía son marca embotellada. Espero que los de garrafón se diluyan y vengan los del PSOE constitucional, los de verdad.