Drones para vigilar el tráfico y más radares en las vías, soluciones de la DGT para 2018

El director general de Tráfico, Gregorio Serrano, ha anunciado este miércoles los proyectos que deparará 2018 en su departamento. Además de lo ya conocido, como que se abordará una nueva ley de Tráfico y Seguridad Vial, amén de modificar el reglamento general de vehículos, destacan entres esas novedades que se colocarán más radares en vías convencionales, incluidos los de tramo, para controlar y sancionar el exceso de velocidad, se publicarán cada trimestre los datos de recaudación por sanciones de velocidad, habrá también un nuevo examen para obtener el carné y se retirará el permiso a los conductores reincidentes en alcohol y drogas, como informó ABC.

También se usarán drones para vigilar las vías interurbanas y sancionar a los que cometan infracciones.

El borrador de la nueva Ley de Tráfico, que contemplará sanciones más tajantes al uso del móvil al volante, se enviará a Interior el próximo mes

Serrano ha enumerado las distintas iniciativas que se llevarán a cabo después de que 52 grupos de trabajo hayan debatido durante el pasado año sobre los diferentes aspectos de la seguridad vial. Se han abordado en el marco de este grupo de trabajo asuntos tan delicados como el repunte de muertos en el colectivo de los motoristas (han aumentado de 214 a 240 en un año, 26 fallecidos más) y cómo protegerlos mejor, planificando incluso hacer obligatorio el uso de ciertas prendas de refuerzo. Por otro lado, Tráfico está muy preocupado por atajar el consumo de alcohol y drogas al volante, así como por el uso elevado de distracciones en el coche, por lo que modificará estos puntos y sus sanciones pertinentes.

Una nueva Ley de Tráfico, cuyo borrador la DGT enviará el próximo mes de febrero próximo al Ministerio del Interior; la adquisición de drones para controlar velocidad y distracciones y un plan para incentivar la renovación del parque de vehículos son otras de las medidas anunciadas por Serrano.

El director general de Tráfico ha dado a conocer el balance de seguridad vial de 2017, año en el que fallecieron 1.200 personas en las carreteras españolas (con datos provisionales a 24 horas de los accidentes), lo que supone 39 más que en 2016, la segunda cifra más elevada desde 2012 y el segundo año consecutivo de ascenso de la mortalidad, lo que no sucedía desde hace casi dos décadas con los repuntes seguidos de 1997 y 1998. Aun así, con el cómputo global de la siniestralidad vial en la mano, con víctimas a 30 días del accidente, se trata del tercer año de crecimiento en número de víctimas, algo que, para la asociación de Víctimas DIA, no puede achacarse al aumento de los desplazamientos, sino, más bien, a un «fracaso en las políticas viales».

La concienciación

Es por ello que Serrano ha abundado en la rueda de prensa concedida este miércoles 3 de enero que la DGT pondrá en marcha en 2018 un «amplio elenco de medidas» que sintetizó en «más control, más educación, más formación y más reformas», y recalcó que «todo será inútil si no hay una concienciación de los conductores».

Serrano detalló algunas de las medidas adelantadas. Tráfico aprobará un nuevo plan contra la velocidad y publicará una instrucción de radares, de manera que trimestralmente publicará la recaudación con los cinemómetros por exceso de velocidad. «No se trata de recaudar, a pesar de lo que recurrentemente se dice y se cuenta, sino de mejorar la seguridad vial», apuntó.

Serrano comentó que la DGT equipará a los motoristas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil con nuevos radaresmóviles para carreteras convencionales que permitirán a los agentes detener a los conductores pocos cientos de metros más adelante si detectan que han superado el límite de velocidad, con el fin de evitar que el infractor notifique posteriormente que otra persona ha pisado el acelerador más de la cuenta y de generar un efecto disuasorio en los automovilistas.

En el campo alcohol y drogas

Además, Tráfico aprobará un protocolo para que a los conductores reincidentes por consumo de alcohol y otras drogas (es decir, sancionados al menos dos veces por alguno de esos motivos en menos de un año) se les retire el carné, no puedan recuperar puntos del carné y sean evaluados por el sistema de salud de la comunidad autónoma correspondiente con el propósito de que determine si ese conductor está capacitado para ponerse ante un volante.

En 2018 habrá un nuevo plan integral de lucha contra el alcohol y las drogas en la conducción y la DGT va a formar a funcionarios para el manejo de drones, puesto que Tráfico comprará varios aparatos de este tipo con el propósito de vigilar las carreteras, con lo que los conductores infractores serán sancionados como ocurre actualmente con los radares Pegasus equipados en helicópteros. A pesar de adelantar la medida, Serrano aclaró que la puesta en marcha de los drones estará lista «como muy tarde en 2019».

Por otro lado, Tráfico cambiará el modelo de formación vial para obtener el carné de conducir, contará con cerca de 100 examinadores más y adquirirá 50 parques infantiles de tráfico móviles.

Un mensaje como en las cajetillas de tráfico

Además, Tráfico invertirá un millón de euros en ayudas a la investigación y aprobará convenios con comunidades autónomas, ayuntamientos, titulares de las vías y empresas, en tanto que los conductores que reciban la notificación de una sanción por velocidad, alcohol y otras drogas, no llevar puesto el cinturón de seguridad, hablar por el teléfono móvil, perder puntos o cometer otra infracción tendrán al final del informe un mensaje de concienciación para que no vuelva a hacerlo. Como las advertencias de las cajetillas de tabaco.