Los rectores crean una nueva asociación y ultiman la negociación de la Ley de Universidades madrileña

«Pedimos un esfuerzo que otros países y regiones hacen para sus universidades públicas», dicen

Los rectores de las seis universidades públicas de la Comunidad de Madrid (Complutense, Autónoma, Politécnica, Alcalá, Rey Juan Carlos y Carlos III) han formalizado la creación de la Asociación de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas de Madrid (CRUMA). La creación de la asociación como tal refuerza su fortaleza en un momento crítico, como es la negociación de la ley de universidades madrileña (Lesuc) que avanza «bastante bien» en un momento en el que se siguen cerrando flecos de la negociación, según confirmaron a LA RAZÓN tanto desde la CRUMA como desde la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades.

No obstante, los rectores aprovecharon para aclarar que aún hay aspectos pendientes de cerrar con los que se sienten «insatisfechos». «Hay muchas cosas por hacer», informa Europa Press. «Hay todavía mucho por hacer en profesorado, estudiantado y sanciones. Necesitamos una ley lo más adecuada posible. La financiación claramente sigue siendo insuficiente. Hay que negociar», expresó el rector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Joaquín Goyache, quien ha tenido que pedir un crédito al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso de más de 34 millones para hacer frente a su situación financiera.

En este sentido, compararon la situación con otros centros universitarios andaluces, que cuentan con un sistema similar pero «tienen 500 millones de euros más» en sus presupuestos que las madrileñas, o que en Europa «una universidad clásica ya tiene más presupuesto que las seis de la región». «Pedimos un esfuerzo que otros países y regiones hacen para sus universidades públicas», reclamó. En este sentido, el rector de la UAH, José Vicente Saz, que será presidente del CRUMA hasta finales de este año, ha recordado que cuando se presentó la LESUC «no se daba respuesta a los problemas» de los centros universitarios, pero el «espíritu» ha virado en los últimos meses, pero siguen a la espera de revisar los últimos flecos con la Consejería.