Todos en Moncloa señalan a Vallès como el responsable del veto a ABC

«Tenemos nuestras prioridades. Pero una cosa es eso y otra no facilitar una cobertura», se sincera un alto cargo del Gobierno

El Ejeuctivo llama para viajar a medios que no se acreditan y a otros que nunca van si el trayecto es en vuelos comerciales

Vallès, único jefe de Comunicación de Moncloa que veta a ABC desde Franco

Moncloa veta a ABC en el viaje de Sánchez a China

El secretario de Estado de Comunicación, Francesc Vallès Jaime García

El veto del secretario de Estado de Comunicación, Francesc Vallès, a ABC para imposibilitarle cubrir la agenda internacional del presidente del Gobierno en aquellos viajes que sólo pueden seguirse viajando en el avión gubernamental es una decisión que en todos los niveles del Gobierno le atribuyen a él personalmente. Una iniciativa que nadie sabe explicar. Y sobre todo que nadie se atreve a justificar.

Ministros, directores de comunicación y otros cargos del Ejecutivo reclaman evidentemente el anonimato para abordar esta cuestión. «¿No se ha solucionado todavía? Explícamelo porque es que no lo puedo entender», se sincera un miembro del Gobierno. «A ver, la comunicación vertical con vosotros y muchos otros medios es la que es. Tenemos nuestras prioridades y unos medios de referencia. Nada que no haga ningún Gobierno. Pero una cosa es eso y otra distinta no facilitar una cobertura. Desde luego me parece mal». Otro ministro se muestra especialmente contrariado: «Que ocurra con la agenda internacional del presidente francamente me sorprende».

En Moncloa, distintas fuentes consultadas, intentan dejar claro que la decisión es únicamente de Vallès y «con quien hay que hablar es con él». Se intenta de forma muy evidente perimetrar sobre él la responsabilidad y que ésta no escale más allá. El secretario de Estado de Comunicación está integrado en el gabinete de la presidencia del Gobierno y reporta formalmente al presidente del Ejecutivo español.

Una estrategia tasada

En los antecedentes de los diferentes equipos en La Moncloa el secretario de Estado de Comunicación ha sido en ocasiones una suerte de contrapoder al director de gabinete del presidente, que formalmente es el primer secretario de Estado del Gobierno. En la primera etapa de Sánchez la relación era absolutamente vertical entre Iván Redondo y Miguel Ángel Oliver. Ahora, sí bien Óscar López está por encima de Vallès en todo lo que tiene que ver con la estrategia política, en materia de comunicación su posición es menor. Sin llegar a ejercer el control que sobre la misma marcaba Redondo. ¿Está Óscar López detrás de esta decisión? «Esto es cosa de Vallès», zanjan en presidencia del Gobierno.

En el Gobierno reconocen que los ministros políticos del Ejecutivo, como Isabel Rodríguez o Félix Bolaños, evitan en sus entrevistas determinados medios, entre ellos ABC, como parte de una estrategia tasada. «Esto sí que es anterior a Vallès. Desde el inicio del mandato de Sánchez. Aunque Rajoy hacía lo mismo», afirma y se excusa a la vez un miembro de la secretaría de Estado de Comunicación que ya tenía un puesto en el Gobierno en la primera etapa gubernamental. «Pero creo que con los viajes no habíamos tenido antes esta situación, ¿no?», se pregunta este alto cargo.

Lo cierto es que no siempre que este medio u otros se ha acreditado a algún viaje internacional con el presidente del Gobierno en los que se dispone del avión estatal ha obtenido plaza. Pero sí en otras ocasiones. Podía interpretarse como algo rotatorio y desde luego esporádico. Porque han sido pocos los viajes en los que el Gobierno ha puesto el avión presidencial a disposición de los medios de comunicación.

Pero el cambio drástico se ha producido durante los dos últimos meses. En este periodo de tiempo Pedro Sánchez ha hecho tres giras europeas en las que ha visitado tres países en 48 horas. Además del viaje a China. Han sido cuatro viajes que por su logística los medios sólo podían cubrir si eran acreditados por la Secretaría de Estado de Comunicación para viajar en el avión gubernamental. ABC no fue aceptado en ninguno de estos trayectos. En estos viajes la secretaría de Estado de Comunicación está llamando a medios que no se han acreditado previamente al viaje y a algunos que no viajan nunca cuando el viaje se realiza en vuelos comerciales. En estos cuatro viajes Vallès ha contado con los mismos medios y ha rechazado rotar las plazas entre más medios. Algo que tampoco habría hecho falta porque en estos viajes ha habido en el avión plazas libres disponibles para haber llevado a más medios de comunicación.