Alonso, sancionado, pierde el podio 100 por un error de un mecánico de Aston Martin

El asturiano fue el mejor después de los Red Bull. Sin embargo, terminó cuarto por una penalización de diez segundos. La superioridad de Sergio Pérez fue incontestable

Fernando Alonso había completado otro fin de semana de ensueño que finalmente no ha acabado como esperaba. El asturiano finalizó en la tercera posición en el Gran Premio de Arabia Saudí, consolidándose como uno de los mejores pilotos de este Mundial. Sin embargo, cayó hasta la cuarta, por detrás de Russell al ser penalizado con diez segundos por no cumplir la sanción de cinco (impuesta en la salida) correctamente. Por su parte, Carlos Sainz fue sexto en una carrera en la que Sergio Pérez no tuvo rival.

Todo empezó demasiado bien para ser real. Alonso tiró de picardía para adelantar a Sergio Pérez y colocarse líder de la carrera. Era difícil aguantar en esa posición, pero le tocaba al mexicano recuperar el puesto perdido. Esa ilusión terminó tan pronto como fue sancionado con cinco segundos por posición incorrecta en la parrilla de salida. Y luego le sumó la de diez cuando concluyó la carrera.

La rajada de Alonso

Fue totalmente inexplicable esa sanción de diez segundos. Además, llegó después de que Fernando hubiera subido al podio junto a Verstappen y Pérez. Ocurrió en la vuelta 20 y esperaron más de una hora para informar de ello. Ni siquiera avisaron de la investigación hasta el final de la carrera. El añadido de todo era que ese tercer puesto suponía el podio número 100 del asturiano.

Alonso no se mordió la lengua y disparó contra la FIA: «Si me llegan a decir que tengo diez segundos, podía haber tirado mucho más… Pero, claro, como no han dicho nada. Aun así, tengo muy buen sabor de boca. (…) No han tenido tiempo aparentemente… La FIA no ha quedado muy bien, han tenido una hora para decirme la penalización. Vamos a ver, porque el equipo no está de acuerdo».

La realidad es que los Red Bull juegan en otra Liga. Pérez apenas tardó tres vueltas en recuperar el liderato, aprovechando el buen estado de su monoplaza. Con su compañero, Max Verstappen, tan atrás (empezó 15º el neerlandés), era su oportunidad para conseguir la primera victoria de la temporada. Y no la desaprovechó.

placeholderFernando Alonso repitió podio. (Reuters/Hamad I Mohammed)
Fernando Alonso repitió podio. (Reuters/Hamad I Mohammed)

Una maniobra sin premio para Ferrari

Verstappen, aunque había empezado atrás, comenzó rápidamente con su remontada particular. Para el vigente campeón, fue un mero trámite superar a pilotos como Tsunoda y Ocon. Al principio, le costó adelantar a Hamilton, pero el duelo real entre ambos parece que concluyó en aquella épica carrera en 2021.

La maniobra de Ferrari le fue de utilidad en principio. Sainz amagó con hacer una parada que resultó un farol. Stroll cayó en la trampa y entró en boxes. Lo aprovechó el madrileño para rodar más rápido con el neumático medio y luego entrar a por los duros.

La dinámica del circuito había cambiado. Cuando se acercaba el ecuador de la carrera, prácticamente la totalidad de la parrilla había optado por los neumáticos duros. Ahí cambió todo. El coche de Stroll se quedó parado y apareció, como de costumbre en Yeda, el safety car. El plan de Ferrari, por tanto, no fue como esperaban. Y les perjudicó. Porque Verstappen adelantó a Carlos Sainz y se colocó cuarto.

placeholderEl coche de seguridad perjudicó a Sainz. (Reuters/Hamad I Mohammed)
El coche de seguridad perjudicó a Sainz. (Reuters/Hamad I Mohammed)

La presencia del ‘safety-car’

El coche de seguridad permitió que Alonso cumpliera con la sanción de cinco segundos, pero acercó al más peligroso de los perseguidores, Verstappen. Poco tardó el neerlandés en superar al Russell y al asturiano. De nuevo, los espectadores comprobaron quiénes son los claros favoritos en este Mundial. Y por qué los Red Bull están varios peldaños por encima del resto de escuderías.

Carlos Sainz, que ya había salido perjudicado del safety car al realizar la segunda parada, vio como era adelantado por Lewis Hamilton. El británico esperó su momento para dejarlo atrás en una recta en la que el madrileño poco tuvo que hacer. Ferrari, a priori el único rival de Red Bull esta temporada, ha visto como Mercedes y Aston Martin le han pasado por encima esta carrera.

El resultado, finalmente, fue el mismo que en la primera carrera. Alonso repitió podio, por detrás de los Red Bull, pero luego se lo arrebataron. También le tocó de nuevo defender esa posición, aunque el ataque de Russell fue menos vehemente que el de Carlos Sainz. Fernando está en plena forma. En una especie de segunda juventud que ha ilusionado a todos los españoles con otro Mundial, a pesar de que esta temporada parece lejano.

placeholderEl dominio de Pérez fue incontestable. (Reuters/Hamad I Mohammed)
El dominio de Pérez fue incontestable. (Reuters/Hamad I Mohammed)

Parecía que los Red Bull tendrían una batalla por lograr la victoria, pero la superioridad de Pérez fue incontestable en la carrera. Cuando apenas quedaban 12 vueltas para terminar, se asomaron los problemas para Verstappen. «Todo está perfecto», le decían desde la escudería al neerlandés, que replicaba: «No, compañero, algo está mal». A Alonso lo avisaron, pero aquel inconveniente quedó en nada. El momento de alta tensión no lo repitió el vigente campeón.

Verstappen insistió a su equipo en la necesidad de que verificaran lo que ocurría, porque notaba algo raro. Afortunadamente para los intereses de Red Bull, el coche continuó igual hasta el final de la carrera y el neerlandés siguió a lo suyo. Eso sí, la victoria de Pérez fue inevitable. Las sonrisas, no obstante, también están en Aston Martin. Pero luego se las borraron.