ATA carga contra el ministro por anunciar una subida de cuotas en 2026 al margen de los autónomos, los agentes sociales y el Pacto de Toledo. El Ministerio lo niega: «No hay ninguna medida adicional, Es absolutamente falso»
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha recibido con las puertas abiertas a la delegación del Parlamento Europeo que ha examinado el destino de los fondos europeos aprobados para el Plan de Recuperación y les ha explicado con pelos y señales todos sus objetivos, incluida la reforma de las pensiones y la transformación del Régimen Especial de Autónomos (RETA). Pero lo ha querido hacer con tanto detalle que se ha pasado de largo. Todo tiene que ver con que el ministro ha proyectado que en 2026 los ingresos por cuotas por parte de los autónomos alcanzarán los 6.500 millones, una cifra que está fuera del acuerdo firmado con las asociaciones de autónomos (ATA, UPTA y Uatae) y con los agentes sociales y el Pacto de Toledo, que únicamente dieron su visto buenos a los tres ejercicios anteriores.
Así, el nuevo sistema de cotización por ingresos reales, que se aplica desde el 1 del enero, cuenta con un periodo de transición de nueve años, hasta 2032, con 15 tramos de cuotas que irán desde los 230 euros hasta los 500 euros y variarán hasta 2025 -fecha tope-, en función de los rendimientos netos de los trabajadores por cuenta propia. Nada quedó acordado desde 2026, algo que ha indignado a la principal asociación de los autónomos, ATA, que ha cargado contra el ministro por negociar por su cuenta con la Comisión Europea dentro de la reforma pendiente de las pensiones -que lleva dos meses de retraso- una subida de las cotizaciones sociales que deberán afrontar pagan los autónomos dentro de tres ejercicios, si que hayan sido informadas ninguna de las partes implicadas.
«Escrivá ha vuelto a decir algo que no es verdad. Lo que ha presentado es un compromiso que adquiere con Bruselas y que no está ni acordado ni pactado. En la reforma del RETA, lo único que está acordado son las cotizaciones hasta 2025, cuyo impacto será neutro, y para 2026 lo único acordado es que se hará un análisis de la situación del sistema y tomarán decisiones entonces», ha criticado con dureza Lorenzo Amor, presidente de ATA, en una entrevista en Telemadrid. También ha calificado la actitud de Escrivá de «patética» porque hipoteca las decisiones de un futuro Gobierno justo antes de unas elecciones generales e ignora al Pacto de Toledo y a los agentes sociales. «No se puede decir que se va a ingresar 6.000 millones de euros cuando no se sabe ni cómo van a evolucionar las cuotas», porque el compromiso firmado era que se «revisarán en profundidad» en 2026. Y Amor lanzó una advertencia al Gobierno por «vender» que se va a subir las cuotas un 50% a los autónomos, «que son más de 3,5 millones de votantes», advirtió.
Los autónomos han conocido esta mañana las intenciones de Escrivá, adelantadas por El País, tras la marcha de la comisión parlamentaria europea, cuya presidenta, Monika Hohlmeier, advirtió ayer que aunque el Gobierno español ha pedido una adenda para tener tiempo de consensuar y aprobar el nuevo sistema de pensiones, «este hito aún no está cumplido y eso significa que el Gobierno debe esforzarse a cumplirlo porque si no, se arriesga a duras consecuencias«. Tal vez por esta razón, Escrivá decidió ir más allá de lo que se había firmado.
El nuevo sistema de cotizaciones hasta 2025 pretende mejorar las pensiones de los trabajadores por cuenta propia, que son actualmente un 43% inferiores a las de los asalariados, así como garantizar sus prestaciones sociales. Esa diferencia entre las pensiones de autónomos y asalariados, de unos 600 euros al mes, se debe a que cerca el 80% de los afiliados al RETA cotizan por la base mínima, de unos 300 euros, lo que repercute en su pensión de jubilación. Sin embargo, presentar una propuesta «sin ser consensuada, es poco serio sin saber lo que hará el próximo Gobierno y sin analizar la evolución», remarcó Amor.
Con menos preocupación ve este paso dado por Escrivá el presidente de UPTA, Eduardo Abad, que no cree «que Escrivá haya traicionado nada. Solo ha dado una previsión de ingresos, que es la que tenemos todos, por cierto». En este sentido, ha recalcado que esta previsión tiene que ver con el aumento de la recaudación que se presume en los próximos años. «Aunque todo apunta a que baje el número de autónomos, aumentará el número de los que coticen más, por lo que que quedará compensada esa merma. Bajará la cantidad, pero subirá la calidad de los cotizantes». Abad ha defendido que «nada ha cambiado del acuerdo firmado. Hemos hablado con el Ministerio y nos han confirmado que todo sigue igual, sin cambios».
Fuentes ministeriales han negado a LA RAZÓN que se vayan a subir las cuotas ni que el ministro haya pasado por encima de los acuerdos firmados. «Es absolutamente falso que el Gobierno plantee una subida de cotizaciones para los autónomos. Las medidas incluidas en la reforma de pensiones relacionadas con los autónomos ya se han aprobado con el consenso de todas las asociaciones y no hay ninguna medida adicional«. El Ministerio sí ha justificado la cifra de 6.500 millones de incremento de recaudación a partir de 2026, porque «se espera un incremento de los ingresos por cotizaciones de este grupo pero, en ningún caso, será por subir las cuotas». Las mismas fuentes apuntan que las causas de esta mejora de los ingresos tiene que ver con la «mejoras de la competitividad, el ensanchamiento de bases -es decir, el aumento de personas trabajando-, y mejoras del empleo», entre otras. Según apostillan desde el Ministerio, «la reforma de autónomos está completada, con un sistema más justo que baja las cuotas a quienes menos ingresan y protege mejor a todo el colectivo».