El Ayuntamiento de Zaragoza ha puesto en marcha una batería de medidas con las que pretende reducir la factura de la luz. Las previsiones de gasto energético a día de hoy en la casa consistorial se disparan hasta los 55 millones a finales de año, el doble que el año pasado. Desde que el consistorio adoptó la decisión de acudir a la compra de energía directamente en el mercado, en 2019, se ha acumulado un sobrecoste de «12 millones», según el Gobierno de PP-Cs, que responsabiliza a ZeC del cambio.
De 2019 a 2021, el recibo de la luz en el ayuntamiento se incrementó un 41%, que se concentra principalmente en el último año (2020-2021) cuando se elevó en 10 millones. Influyó, y mucho, la subida del precio de la luz.
Son las estimaciones del concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, que ha asegurado que actualmente, y con el contrato en vigor, ha sido muy complicado negociar precios razonables. Lo ha hecho durante la sesión plenaria en la que ha salido a relucir el precio de la luz en más de una ocasión y en la que unos y otros se reprocharon medidas, decisiones e inacciones.
PP y Cs han logrado sacar adelante, gracias a los votos a favor de Vox, una moción en la que se instaba al Gobierno central a destinar fondos a los entes locales para afrontar los gastos extraordinarios.
Según Serrano, el consistorio está pagando unas facturas muy elevadas como consecuencia de la decisión de ZeC de acudir a la compra directa de la energía, en lugar de acordar un precio fijo, además de por la subida generalizada del precio de la luz.. «Una decisión terrible», ha asegurado Serrano.
El que fuera alcalde, Pedro Santisteve, ha defendido la decisión porque, según ha dicho, en ese momento las previsiones indicaban que la factura sí se iba a reducir. Entonces se dijo que el ahorro oscilaría entre un 10% y un 15% por el hecho de evitar el peaje de las comercializadoras y reduciendo costes. Solo sucedió un año porque no se contaba «con el mercado de la especulación» y con unas «unas compañías eléctricas que nos están robando», ha criticado Santisteve.
Según los datos facilitados por el área de Urbanismo, en 2019 el gasto en energía del ayuntamiento ascendió a 18,6 millones. Un año después la factura se redujo hasta los 16,9 millones, un ahorro de 1,4 millones, que desde PP-Cs relacionan con la pandemia y el confinamiento.
Fue un espejismo porque en 2021, y según Urbanismo, se pagó un 24% más, hasta los 26,2 millones, por el hecho de acudir a la compra directa de energía, un sobrecoste de 7,5 millones en los que influyeron, claro está, el alza del precio por kilovatio hora. El primer pico se registró en enero de 2021. Este año calculan un extra de 22 millones.
A sabiendas de que la partida presupuestada para el pago anual de la luz, el Gobierno de PP-Cs a decidido reservar 7,1 millones de euros del remanente para pagar la luz. Desde el Gobierno municipal están negociando la posibilidad de acudir a un contrato PPA (compraventa de energía limpia a largo plazo a un precio prefijado) que sea 100% verde que se produzca en el entorno de Zaragoza.
El ayuntamiento ha adoptado medidas para rebajar la factura y evitar así que se alcancen los 55 millones que se prevén si los precios siguen tan elevados. Entre ellas se ha propuesto rebajar un grado la temperatura de los equipamientos municipales; apagar la calefacción desde mañana; mantener las ventanas cerradas en los espacios con sistema de climatización o reducir el horario de encendido del alumbrado (con 20 minutos menos al día se ahorrarán 2.800 euros diarios).
