A los pocos días de que comenzase la guerra contra Ucrania, el presidente del país, Volodímir Zelenski, animó a cualquier civil extranjero a alistarse en las filas ucranianas para luchar contra Rusia. «Esto no es solo una invasión de Ucrania por parte de Rusia, sino el comienzo de una guerra contra toda Europa», afirmó.
El Gobierno creó la Legión Internacional para la Defensa Territorial, a la que se han unido entre 16.000 y 20.000 personas. Uno de ellos es Wali, un canadiense considerado como el mejor francotirador del mundo, cuyo apodo se traduce como «guardián» en árabe.
Su experiencia pasa desde Afganistán hasta Irak (donde combatió a los yihadistas), y algunos medios indican que es el francotirador que más muertes ha causado desde una mayor distancia, anotando cuarenta víctimas a 3,5 kilómetros en un solo día.
Wali, que tiene 40 años y trabaja como programador informático, es de origen francés pero siempre ha vivido en Canadá, donde reside con su mujer y su hijo recién nacido.
Sin embargo, cuando Zelenski hizo un llamamiento para que quien quisiera se uniese a las brigadas internacionales de Ucrania, un amigo de este profesional de la guerra contactó con él para que se sumase a la lucha contra el ejército de Putin.
«Solo quiero ayudarles», afirmó más tarde en una entrevista. «Es como si un bombero escucha una sirena de incendios, tienes que ir», defendió.
