Casado y Feijóo se reúnen en privado antes de la cita con los barones

El presidente del PP, Pablo Casado, se reunirá con Alberto Núñez Feijóo este miércoles en Génova antes que con el resto de barones autonómicos. Según ha podido saber El Confidencial, ambos líderes se verán las caras en privado para debatir la nueva etapa que se abre en el PP. El gallego podría asumir las riendas del partido tras el próximo congreso nacional y ya cuenta con el aval de la mayoría de territorios.

Todos los presidentes autonómicos y líderes regionales del PP están citados este miércoles a las 20:00h en Génova. Una vez asumido que Pablo Casado tiene los días contados al frente de la dirección nacional, sólo queda saber cuándo se hará efectiva su salida. En el entorno del dirigente apuestan por aguantar su dimisión al menos hasta el próximo martes, día en que se reunirá la junta directiva nacional del PP, en la que aspira a pronunciar su discurso de despedida ante más de 400 cargos orgánicos. Pero la decisión no sólo depende de él, sino también de los líderes territoriales que se han desplazado este miércoles a Madrid.

Referencias a la despedida de Pablo Casado durante la sesión de control

Y entre ellos hay división de criterio. Dos son las opciones: forzar la salida de Pablo Casado esta misma noche –opción por la que se decanta Alberto Núñez Feijóo– o aguantar su despedida bien una semana o bien hasta la celebración del congreso extraordinario previsto para principios de abril, escenario este último por el que se decantan los últimos fieles de Casado. A la espera de las conclusiones de la reunión clave de esta noche, sólo hay una cosa clara: Casado ha de asumir que «tiene que dar un paso al lado». Que su tiempo al frente del PP ha finalizado.

«La salida dependerá del propio Pablo. Si acude hoy a la reunión con una actitud constructiva, pide perdón por los errores, deja claro que se despide el martes y da un paso a un lado dejando el congreso en mano de una comisión organizadora, no pasará nada (…). Si hay hostilidad, forzarán su dimisión«, comentan en una baronía del PP, en la que apuestan por pacificar la situación interna. A su entrada a la sesión de control en el Parlamento andaluz, antes de coger el AVE con destino Madrid, Juanma Moreno apostaba públicamente por escuchar los deseos de Pablo Casado. «Vamos a esperar a sentarnos con él y que nos cuente cuáles son sus propuestas, sus ideas. Tenemos que ser generosos todos», instaba.

Otras baronías consultadas prefieren abstenerse de posicionarse antes de escuchar al presidente, si bien apuestan porque no haya división entre los asistentes al cónclave y los líderes autonómicos apuesten por un «mensaje común». «Cuánto más acuerdo tengamos, mejor para todos y mejor para el partido», reiteran.

Sea antes o después, la salida de Pablo Casado se da por segura. Los estatutos del PP establecen que, una vez convocado el congreso extraordinario, una comisión organizadora debe hacerse con las riendas del proceso y convertirse en la máxima autoridad hasta que un candidato resulte coronado. Dicho órgano asume la dirección política del partido durante el tiempo en que la formación esté en situación de interinidad.

Tras ser derrotado por una moción de censura, Mariano Rajoy presentó su dimisión y la junta directiva nacional convocó un congreso extraordinario en el que el expresidente pudo pronunciar sus últimas palabras como líder del partido. La comisión organizadora que pilotó el partido hasta el cónclave quedó en manos del eurodiputado Luis de Grandes, pero el expresidente tuvo una salida digna. «Que Casado se pueda ir como se fue Rajoy. Cerrando las heridas y con el plenario en pie», opinan fuentes populares.