Sánchez advierte a Rusia de «consecuencias masivas» y «sanciones gravísimas» por parte de la UE

Pedro Sánchez se ha explayado hoy por primera vez ante los medios sobre la situación que se vive en Ucrania por la amenaza de Rusia y el papel que España ha querido jugar desde el primer momento en el conflicto como miembro de la OTAN. El presidente del Gobierno ha justificado la disponibilidad de los efectivos españoles en la zona porque se trataba de operaciones sus previstas en el marco de la Alianza. Ayer el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró que no se está debatiendo el envío de tropas a suelo de Ucrania. Sánchez ha justificado la posición del Gobierno, que confronta abiertamente con Putin, como un mensaje de «unidad» dentro de la OTAN y la Unión Europea ante una agresión a la soberanía nacional y la integridad territorial de Ucrania.

«Eso se tiene que ver garantizado», ha dicho Sánchez, que ha destacado la política de disuasión y advertencias hacia Rusia que se ha acordado en la UE pero que disgusta a sus socios habituales en la política doméstica: «Es importante trasladar que si ocurre lo que nadie quiere que ocurra, evidentemente que va a haber sanciones importantes hacia Rusia. Va a tener unas consecuencias masivas, gravísimas para su economía en términos de sanción por parte de la UE»

El presidente recibía hoy en La Moncloa a la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin. Un país importante en este contexto por su vecindad con Rusia, con el que comparte más de 1.300 kilómetros de frontera. Finlandia es miembro de la Unión Europea pero no de la OTAN. Y su posición de equilibrio con Rusia aporta muchas claves sobre la situación actual. En este sentido, la mandataria ha sido fría y crítica con las acciones de Rusia. Marín ha reivindicado la libertad de cualquier estado de «elegir sus alianzas de seguridad». Y ha advertido a Moscú de que «cualquier otra agresión tendría enormes consecuencias». Finlandia ha querido trasladar «un mensaje claro e inequívoco» y es que si Rusia «continúa con su agresión eso tendrá consecuencias masivas y serias».

Rusia está planteando en sus condiciones negociadoras que exista un compromiso de que Ucrania no se integrará en la OTAN. Y reclama además la vuelta de la Alianza a la situación de 1997. Esto afecta claramente a Finlandia, que no es miembro de la OTAN pero que con las condiciones de Rusia vería cerrada la puerta a una incorporación futura. Aunque Marin ha dicho que en este momento Finlandia no plantea integrarse en la OTAN, sí ha insistido en que «existe esa posibilidad» y que «es importante que se mantenga abierta y sea nuestra».

En esta línea, el presidente del Gobierno, ha evitado responder a la pregunta que se le ha formulado respecto a las diferencias dentro de la coalición. Y se ha centrado en defender una unidad que, por ahora en el espectro político español, se ciñe al deseo común de que el conflicto no se convierta en una guerra convencional. Pero con muchas diferencias sobre la posición y la retórica del Gobierno.

Tras haber recibido la llamada de Pablo Casado, Sánchez ha constatado de primera mano que el PP siempre apoyará al Gobierno en operaciones que se circunscriban dentro del mando de la OTAN. Así, el presidente ha mantenido un discurso que sin obviar la negociación diplomática no renuncia a poner en primer término la política de disuasión. «España apoya la integridad territorial y la soberanía nacional de Ucrania. Debemos exigir el respeto a la legalidad internacional», ha dicho el presidente. Lo que Sánchez ha querido trasladar es el mensaje de que «sí ocurre lo que nadie quiere que ocurra va a haber sanciones importantes hacia Rusia».

Y no ha querido mostrar preocupación por posibles represalias de Rusia en forma de guerra hibrida. «Es una cuestión de seguridad de todos. Estaremos siendo solidarios y comprometidos con quienes viven esta circunstancia en primera persona», ha dicho. Esta es una de las preocupaciones de los socios habituales de Sánchez: las consecuencias económicas para la UE y en concreto para España de un choque abierto con Rusia.