Casado declara la guerra total a Calviño por ser una «defraudadora fiscal» y la ministra «más incompetente»

La vicepresidenta primera tuvo un enfrentamiento con el líder del PP el pasado miércoles en el que le llamó «desequilibrado»

Casado y Calviño, en el acto donde tuvieron el encontronazo.
Casado y Calviño, en el acto donde tuvieron el encontronazo.Chema MoyaEFE

Pablo Casado ha declarado la guerra a Nadia Calviño. El líder del PP la ha acusado de ser una «defraudadora fiscal», «la ministra de Economía más incompetente de toda la historia de España» y la «peor» titular de Finanzas «de la Unión Europea».

Por consiguiente, el líder del PP ha pedido a Pedro Sánchez que la «eche mañana» y cumpla su promesa de hace unos años de destituir y apartar de su Gobierno a cualquier persona que haya utilizado una «sociedad instrumental» para ahorrarse impuestos. Casado se refiere a un episodio que salió a la luz en 2018, cuando ella asumió el cargo en el primer Gobierno de Sánchez, sobre el método que supuestamente empleó para comprarse una casa en un acomodado barrio del norte de Madrid.

Esta repentina animadversión contra Calviño se ha desatado después del encontronazo que ambos tuvieron el pasado miércoles, cuando coincidiendo en un acto con el Rey se desató una agria discusión entre los dos que culminó con ella llamándole «desequilibrado».

El episodio comenzó cuando la vicepresidenta primera se mostró «asqueada» ante Casado por su manera de hacer oposición a Sánchez en el Congreso y por haber sacado en la refriega parlamentaria el tema de los abusos de las menores tuteladas en Baleares y la Comunidad Valenciana para insinuar que lo estaban encubriendo. Luego, Calviño se dirigió al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, al que sin pararse le dijo: «Tu jefe está desequilibrado».

Este incidente provocó que ayer el PP se revolviera en pleno contra Calviño, con muchos de los dirigentes populares saliendo en tromba para arremeter contra ella. Pero faltaba Casado, que lo ha hecho este viernes en una intervención en la Junta Directiva Provincial del PP de La Coruña, en la que ha estado presente el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo.

Casado ha cargado contra Calviño con toda dureza. «Yo sabía de Calviño que era una defraudadora fiscal», porque «utilizó una sociedad instrumental con dos testaferros» para «comprar su mansión de 300 metros cuadrados, defraudando decenas de miles de euros», ha advertido. Para continuación exigir a Sánchez destituirla de manera inmediata por ello.

Asimismo, ha censurado de manera total su gestión al frente de Economía. La ha tachado de ser la ministra del ramo «más incompetente de toda la historia de España» y lo ha argumentado esgrimiendo que tiene «las peores cifras» de destrucción del PIB, de inflación y de déficit.

De igual modo, la ha sentenciado también como «la peor ministra de Economía de toda la Unión Europea» porque las previsiones de la OCDE sitúan a España en la cola de la recuperación y de paro.

Feijóo y Casado, en la reunión del PP de este viernes
Feijóo y Casado, en la reunión del PP de este viernesCabalarEFE

Casado ha señalado que ha quedado desenmascarado el «falso disfraz de moderación» del que se reviste Calviño cuando se parapeta en que ella es una «tecnócrata». Sin embargo, ha recalcado que detrás de esa «falsa apariencia» luego resulta que en privado lo que hace es «insultar» e «impedir» el ejercicio de la oposición.

«Sí, el otro día la vicepresidenta primera del Gobierno, ésa que supuestamente es tan tecnócrata, tan transversal y tan buena gestora, resulta que insultó al PP porque exigimos la investigación de abusos a niñas tuteladas por los gobiernos socialistas de la Comunidad Valenciana y Baleares», ha dicho. Para luego, apostillar, que él le pagan el sueldo para hacer oposición y exigir responsabilidades «también las familias de las niñas prostituidas bajo la tuteladas del señor Puig y la señora Armengol».

Defensa de su estilo «firme como Feijóo»

Casado ha hecho una defensa a ultranza de su estilo de oposición y del tono y los temas que emplea. Para defender que por un lado tiene «firmeza» pero que, por otro, ha tendido la mano al Gobierno en numerosas ocasiones. Y ha citando la ley de pandemias, los fondos europeos, la educación, Cataluña, Navarra para evitar pactos con Bildu, pensiones, seguridad o inmigración. Todo ellos pactos denegados por Sánchez, ha recalcado, porque ninguno de ellos «le dio la gana».

«Por tanto, ¿qué más puede hacer el PP? ¿Pintamos el logotipo de rojo? ¿Nos subrogamos a la disciplina sanchista? No, aquí estamos para ser alternativa y para decir las cosas como hay que decirlas», ha ahondado.

Así, ha defendido que está haciendo lo que otros dirigentes del PP, a los que habitualmente se les aplaude su tono, han hecho anteriormente: «Yo veía a Alberto Núñez Feijóo que era el más firme contra Touriño y Anxo Quintana. Yo he visto a Juanma Moreno en la oposición y era el más firme contra Susana Díaz, Chaves y Griñán. Yo he visto a Mariano Rajoy muchos años en la oposición…».

En resumen, Casado ha dibujado que la oposición del PP es «firme pero responsable, esperanzadora e ilusionada; con políticas de Estado y propuestas diarias, por mucho que lo intenten acallar los medios de comunicación».