En un auditorio del Museo Reina Sofía lleno de víctimas del terrorismo, representantes de la política y autoridades y con una invitada de excepción, la Reina Sofía, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) ha celebrado este martes su 40 aniversario.
Hace cuatro décadas que tres mujeres, Ana Mº Vidal- Abarca, Sonsoles Álvarez de Toledo e Isabel O’Shea, decidieron formar, casi en la clandestinidad, la AVT la asociación de terrorismo más antigua del mundo. El fin de esta conmemoración, colocar en el centro del relato a los verdaderos héroes de la historia, las víctimas del terrorismo.
«No lo hemos tenido fácil. Ni entonces ni ahora», ha dicho en el discurso inaugural, Maite Araluce, presidenta de la asociación.
«Hace 40 años las víctimas éramos meros números: atentados cada día, funerales por la puerta de atrás, el rechazo de toda la sociedad por convertirte en víctimas del terrorismo»; ha recordado Araluce.
Pero ahora, señaló la presidenta de la asociación tampoco es nada fácil.
Fin ‘ongi etorri’
«Hemos soportado que los que reciban homenajes no son los seres queridos de las víctimas, sino que sean sus propios asesinos», ha dicho Araluce. Sobre el comunicado que el colectivo de presos de ETA hizo ayer público, con la intención de poner fin a los homenajes a los presos y convertirlos en actos «privados y discretos», la presidenta de la AVT ha subrayado que «habrá que ver si es verdad» y ha remarcado que «la mejor manera de sanar las heridas de las víctimas es colaborando con la justicia para resolver los más de 300 casos sin resolver».
Sobre esto también se ha pronunciado la presidenta del a Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha sido una de las premiadas con el X Premio a la Memoria, Dignidad y Justicia de la AVT. «Ahora intentan cambiar la narrativa y hacer que somos nosotros los que no queremos la paz, pero en un lugar donde no hubo guerra», ha dicho la presidenta de la Comunidad a los medios, «no puede haber paz». Ayuso ha denunciado que los «herederos de ETA» siguen con los «misma agenda política de siempre», como es la independencia del País Vasco y la de «instaurar un gobierno de izquierda radical» con el beneplácito del PSOE y con «un buenismo etarra».
El pasado 3 de noviembre, la Asociación Víctimas del Terrorismo reclamó a los grupos parlamentarios, a excepción de EH Bildu, que apoyasen su propuesta de enmienda de modificación del Código Penal para tipificar el delito de humillación a las víctimas del terrorismo como un delito autónomo de enaltecimiento del terrorismo. Según explica la AVT, esta propuesta busca poner fin a los ‘ongi etorri’, los homenajes a los terroristas de ETA que se celebran en el País Vasco y Navarra. Ya que estos homenajes eran verdaderas «aberraciones» para las víctimas del terrorismo.
Piden colaboración para el fin de la impunidad
Sobre los casos sin resolver, Araluce ha apuntado que hay que evitar falsas esperanzas, «ya que provocan mucho dolor en las víctimas», pero que las víctimas «tienen derecho a la verdad». Todavía, según números de la asociación, hay más de 300 casos de los que no se conoce autor material.
Para aquellos casos en los que por prescripción, amnistía, indultos u otras circunstancias similares se haya privado a las víctimas del derecho a la justicia «se viene trabajando en el derecho a la verdad de las víctimas para que, con independencia de que puedan ser condenados, se conozcan los responsables terroristas y las circunstancias relevantes que rodearon a cada atentado».
En el recuerdo, también han estado presentes, no solo las víctimas del terrorismo de ETA, ya que de los casi 5.000 asociados localizadas por toda España, hay más de 10 grupos terrorismos, como GRAPO, FRAP, Terra Lliure, 11 M y de diferentes grupos yihadistas.
«Todavía nos queda mucho camino por recorrer» ha dicho la presidenta de la AVT y seguirán trabajando hasta la «derrota definitiva del terrorismo», entendida como su desaparición «total, definitiva, unilateral y sin contrapartidas». Y ha querido subrayar que, «Bildu no es un partido progresista. Es el partido heredero institucional de ETA y a día de hoy sigue defendiendo que algunos asesinatos de ETA estuvieron justificados». Por eso desde la AVT llevan años recopilando indicios para su ilegalización, «ya que no podrían ser morales mientras no defienda que la violencia de ETA no tuvo ninguna justificación».
«Queremos una España sin terrorismo y queremos una España en que las víctimas sean las vencedoras y los terroristas los vencidos», ha concluido la Maite Araluce.
En el acto, presidido por la Reina Sofía y con la presencia de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Díaz Ayuso, ha congregado a más de dos centenares de personas, víctimas del terrorismo, y en la que también se ha querido hacer mención especial a diferentes autoridades, con la Cruz de la Dignidad. Entre ellos, altos cargos de la Guardia Civil, como Diego Pérez de los Cobos, políticos, fiscales de la Audiencia Nacional, como Carlos Bautista y también periodistas como Ángel Expósito. El acto ha tenido tres momentos de ovación multitudiaria, el primero cuando se le ha hecho entrega la Cruz aL coronel Pérez de los Cobos, el segundo cuando la presidenta de la Comunidad de Madrid ha subido al escenario para recoger su conmemoración y el tercero con la subida al escenario de la Reina Sofía.