Vivas al Rey y a las Fuerzas Armadas en el primer desfile militar tras la pandemia

Aplausos, vivas al Rey y a las Fuerzas Armadas y ambiente festivo fueron las tónicas del desfile militar por el Día de la Fiesta Nacional. Es el primero tras el comienzo de la pandemia hace un año y siete meses.

La ciudadanía volvió así a volcarse con sus Fuerzas Armadas luciendo la bandera nacional en día tan significativo. Todo ello en el eje del madrileño Paseo de la Castellana, entre las plazas de Cuzco y Raimundo Fernández Villaverde, con la plaza de Lima como escenario blindado, con las autoridades civiles y militares presentes.

Felipe VI, con uniforme de capitán general del Ejército de Tierra, volvió así a presidir este martes los actos del 12 de Octubre que comenzaron con los honores militares a Sus Majestades los Reyes, la revista del Rey al batallón de honores, el saludo a autoridades, el salto paracaidista con la bandera por la Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire (PAPEA), el posterior izado y homenaje a la bandera nacional y el acto homenaje a los que dieron su vida por España.

Previamente, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fue recibido con pitidos, abucheos y gritos de «fuera» y «dimisión» cuando la megafonía anunció su cargo a la hora de saludar a los Reyes.

Esos silbidos cesaron con los acordes del Himno Nacional y el inicio de los actos. Pero volvieron, con gritos de «dimisión», «parásito» y otros insultos, esporádicamente. Una circunstancia esperada y que no fue a más durante la celebración de la jornada. Sí se repitió a la conclusión del mismo con nuevos gritos de «Sánchez, dimisión» y «fuera, fuera».

Además de al presidente del Gobierno, los Reyes y la Infanta Sofía saludaron a la ministra de Defensa, Margarita Robles, al jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Teodoro López Calderón, y a la presidenta y alcalde de Madrid, Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida.

Hay que destacar que la Princesa Leonor no pudo acudir pues su presencia le obligaría a guardar una cuarentena de cinco días a su vuelta al colegio de Gales -UWC Atlantic College- donde cursa primero de bachillerato.

Más de 2.500 militares

Tras los acordes de ‘La muerte no es el final’ y el homenaje a los que dieron si vida por España, tuvo lugar la primera pasada de la Patrulla Águila, con los colores de la Bandera Nacional. Se dio paso entonces un desfile aéreo que congregó a una setentena de aeronaves.

Los cazas Eurofighter o F-18, los aviones de transporte A400M y C-295, los helicópteros NH-90 o Chinook fueron algunas de las que desfilaron junto a los apagafuegos del Ejército del Aire.

El desfile terrestre, con más de 2.500 militares, congregó las mayores ovaciones de los asistentes que rodearon los aledaños de la plaza de Lima. Los gritos de «Viva España» o «Viva las Fuerzas Armadas» así como «Viva el Rey» se pudieron escuchar desde la tribuna de prensa.

Los pasos de La Legión, la Brigada Paracaidista, los Regulares, la Guardia Real, la Unidad Militar de Emergencias o la Guardia Civil fueron de las unidades más ovacionadas. Máxime tras 19 meses de actividad frenética de las Fuerzas Armadas en misiones contra el coronavirus, el temporal Filomena, la crisis en la frontera de Ceuta con Marruecos, las evacuaciones en Afganistán o por la actividad volcánica en la isla de La Palma.

Ausencias habituales y obligadas

A este acto central por el Día de la Fiesta Nacional acudieron todos los miembros del Gobierno, a excepción de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, por encontrarse en Bruselas. También asistieron todos los presidentes autonómicos excepto Íñigo Urkullu (País Vasco), Pere Aragonès (Cataluña), Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha) que se encuentra en Bruselas y Alberto Núñez Feijóo (Galicia), que está preparando el debate sobre el Estado Autonómico de Galicia que tiene lugar del 13 al 15 en el Parlamento gallego.

Tras la conclusión del desfile los invitados se dirigieron al Palacio Real para la recepción de los Reyes, que este año fue retomada, como el propio desfile, con estrictas medidas sanitarias.

Al tradicional «besamanos», este año sin corrillos por razones sanitarias, acudieron 200 invitados. Duró unos díes minutos. El ministro de Educación, Manuel Castells, aunque sí fue al desfile, no acudió al Palacio Real. Tampoco lo hizo Alberto Garzón.