La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, ha evitado este miércoles dar cualquier explicación en torno a la crisis con Marruecos en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, sin más detalles que generalidades sobre la convivencia de Madrid y Rabat. «Confiamos en seguir desarrollando nuestra relación y nuestra cooperación, que ha sido tan beneficiosa», indicó.
La escueta intervención de Laya se ha hecho después de que la diputada del PP Valentina Martínez Ferro le preguntase sobre la situación en el ministerio y la problemática con Marruecos, enumerando los episodios y desencuentros con el país vecino en los últimos meses, desde el cierre comercial de Melilla a la suspensión de la Operación Paso del Estrecho o la retirada de la embajadora marroquí en España. «No pedimos que resuelva la crisis, ya que no da puntada sin lío; le urgimos que deje de hacer el ridículo, creyendo que nos engaña y lo que ocurre es que la que no se entera de nada es usted. ¿Nos puede decir qué está pasando con la política exterior española?», espetó Martínez Ferro.
La respuesta de la titular de Exteriores, sin embargo, fue una evasiva más, sin detallar ni profundizar en ninguna de las cuestiones planteadas. Laya se limitó a señalar el compromiso del Gobierno de Pedro Sánchez en «mirar al futuro y con diálogo», destacando que esa ha sido la línea a seguir con el país vecino en los últimos años, con buenos resultados en el marco de la interdependencia entre ambos. «España y Marruecos han sido capaces de trabajar en una cooperación modélica en muchos ámbitos», añadió. Si bien la ministra ocupó el grueso de su primera respuesta en explicar su predisposición a seguir trabajando, aunque sin detallar la hoja de ruta en ese sentido, en la segunda sí tuvo tiempo para reprochar la actitud del PP en la crisis, habida cuenta de que, según dijo, han cambiado de criterio respecto a lo defendido en marzo.
Laya, criticada por «dilapidar la credibilidad» de España en el exterior, reclamó a los populares «una vuelta a la política de Estado y les recordó que el pasado 10 de marzo aprobaron una moción en el Senado a favor del alto al fuego en el Sahara Occidental. «Pedían que buscásemos una solución en Naciones Unidas, en lo que debe constituir una política de Estado», espetó.
Posición sobre el Sahara Occidental
El Sahara Occidental, precisamente, fue otro de los temas tratados por González Laya en el Congreso, tras otra pregunta del diputado de Bildu Jon Iñarritu. Preguntada si España se reafirma en el apoyo a la ONU y la libre determinación del Sahara, la ministra de Asuntos Exteriores dejó claro que la posición es la misma. «La posición de España con respecto al Sahara es una política de Estado, por eso es constante, no la ha cambiado este Gobierno y francamente no la va a cambiar porque está anclada en principios irrenunciables como son la defensa del multilateralismo y el respeto de la legalidad internacional, ambos pilares de la acción exterior», aseveró.
Así, la titular del ramo reiteró que esta posición no dista en ningún caso de las resoluciones de Naciones Unidas al respecto, lo que se reconoce como un rechazo al reconocimiento de la soberanía de Marruecos sobre este territorio. «Esta es la posición que apoya España, esta es la que ha sido y esta es la que va a ser», concluyó la ministra tras las preguntas de Iñarritu.
