España, el país con peor tasa de incidencia del coronavirus del mundo

A pesar de que Pedro Sánchez presume de gestión frente al coronavirus asegurando que España fue el primer país occidental en tomar medidas de confinamiento, los números hace tiempo que le desmienten. Según el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades, que recoge datos a diario sobre la evolución de la pandemia, nuestro país es el octavo del mundo con peor tasa de incidencia y el primero si excluimos naciones con menos de 10.000 casos confirmados (España supera ya los 160.000).

La tasa de incidencia («Attack rate») pone en relación casos positivos con el total de la población, y ahí España queda en muy mal lugar. De todos los países que han superado los 10.000 casos detectados (y que son países con una población numerosa), España ocupa la primera posición con un índice de 326,73.

El virus se ha cebado con España y, pese a las dificultades para detectar casos leves o asintomáticos e incluirlos en la estadística, la incidencia del Covid-19 en nuestro país es superior a la de muchos países de nuestro entorno. A finales del mes de marzo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguraba que España era el segundo país del mundo que más test había realizado, solo por detrás de Suiza.

Países ordenados por el ratio de incidencia del Covid-19. En naranja, los países con más de 10.000 casos confirmados a fecha 10 de abril de 2020
Países ordenados por el ratio de incidencia del Covid-19. En naranja, los países con más de 10.000 casos confirmados a fecha 10 de abril de 2020 – Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades

A pesar de esa afirmación, Suiza está por detrás de España en tasa de incidencia. Pese a ser en palabras del ministro el país con más test realizados en proporción a su población, la tasa de incidencia del virus es 50 puntos inferior a la española si tomamos como referencia los datos del viernes 10 de abril. La estadística del Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades no deja en buen lugar la gestión de Pedro Sánchez al frente de la crisis.