El estado de alarma por el coronavirus se extenderá 15 días más. El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en la reunión por videoconferencia que ha mantenido esta mañana con los presidentes autonómicos, les ha trasladado que su propósito es alargar la declaración de alarma otras dos semanas, hasta el 11 de abril. Después el presidente lo ha hecho oficial en una comparecencia en La Moncloa. Para ello el Gobierno requiere ahora la autorización del Congreso de los Diputados. Ya hay convocado un pleno la próxima semana, el día 25.
Esta medida fue aprobada por el Consejo de Ministros el pasado sábado 14 de marzo para contener el imparable avance del coronavirus en España. Supone la implementación de una serie de limitaciones a los ciudadanos, que han quedado confinados en sus casas salvo causa mayor.
La Constitución obliga a una comunicación formal a la Cámara, que Sánchez hizo el miércoles. Ahora es necesario para alargar este periodo excepcional una votación en el Congreso, que se da por supuesto que lo avalará. La duración inicial del estado de alarma era de 15 días, hasta el 29 de marzo. Durante esta semana, sin embargo, los casos de contagio se han disparado y ya ayer el propio Sánchez advirtió de que nos enfrentamos a días muy duros.
El presidente ha justificado hoy la ampliación de los 15 días iniciales de confinamiento en que está resultando una medida «efectiva». «El esfuerzo que estamos haciendo dará sus frutos», dijo. El jefe del Ejecutivo se ha mostrado seguro de que obtendrá el respaldo de la Cámara «por unanimidad». «Estoy convencido de que los partidos me apoyarán», afirmó.
Pero, aunque este aval se producirá, en la conversaciones ayer con los presidentes autonómicos se volvió a poner de manifiesto diferencias de criterio sobre el alcance de las medidas y se produjo un reproche general de todos los presidentes a la falta de material sanitario.
CINCO NUEVAS MEDIDAS
1. Todas las comunidades autónomas dispondrán de todas las instalaciones y medios humanos de las residencias privadas de mayores. Se hace con el objetivo de paliar la situación de saturación de las residencias públicas y mejorar las condiciones de vida de los mayores, así como reducir su nivel de riesgo de contagio.
2. Restricción temporal de los viajes que se realicen desde fuera de España y que no sean imprescindibles. La restricción tendrá una duración de 30 días y están exentos los residentes en la UE y el espacio Schengen y que se dirijan a su lugar de residencia. Así, podrán viajar a España, los españoles que quieran regresar, los turistas que vuelvan, los transportistas de mercancías, personal de vuelo, personal diplomático o personas que acrediten causas de fuerza mayor. La orden acuerda también «el cierre, con carácter temporal, de los puestos terrestres habilitados para la entrada y la salida de España a través de las ciudades de Ceuta y Melilla».
3. Las Fuerzas Armadas amplían sus actuaciones: realizarán por vía área o terrestre el traslado de pacientes de centros saturados a centros próximos con recursos sanitarios disponibles, si fuera necesario; garantizar la seguridad de las infraestructuras críticas, de manera que se libere de esta tarea a personal de las fuerzas y cuerpos de seguridad; transporte logístico de material sanitario procedente del extranjero, para el transporte y distribución de este material dentro de España, transporte de personal sanitario entre la Península y las islas; traslado de españoles con dificultades para regresar al país.
4. Se facilitarán recursos a los Ayuntamientos para el reparto a domicilio de comida, productos de primera necesidad y productos farmacéuticos a las personas mayores, para evitar que tengan que salir de su hogar y evitar el riesgo de contagio.
5. Se crea una reserva estratégica de productos y material sanitario para luchar contra futuras pandemias.
Por segunda vez -ya lo hizo el pasado domingo-, el jefe del Ejecutivo ha debatido la situación con las autonomías. Sólo el dirigente catalán, Quim Torra, se negó a firmar hace una semana el comunicado conjunto que se produjo tras la reunión. En el encuentro de hoy han participado también los cuatro ministros que están en el comité de crisis: Salvador Illa (Sanidad), Margarita Robles (Defensa), Fernando Grande-Marlaska (Interior) y José Luis Ábalos (Transportes).
Torra defiende que se necesitan medidas más duras y el confinamiento de la comunidades con más número de casos, como Madrid y Cataluña. Esta mañana lo ha vuelto a reclamar, pese a que Sánchez mantiene que ya ha adoptado iniciativas muy «drásticas», las mayores de Europa y probablemente del mundo, según sostiene el Gobierno.
Ante quienes le acusan de continuar con su cruzada independentista tanto por sus reproches permanentes al Gobierno -a quien no ha dudado en criticar en medios internacionales- o su defensa de que Cataluña pueda tomar sus propias decisiones, el jefe del Govern ha ampliado hoy la demanda de confinamiento total al País Vasco, La Rioja y alguna autonomía más, además de Madrid y Cataluña.
El presidente de la Generalitat, según las fuentes consultadas, ha propuesto un gran acuerdo de Estado de solidaridad con una serie de cuestiones, entre ellas el endurecimiento de la situación actual. De qué sirve que haya trabajadores este fin de semana en casa si mañana van a volver a sus empresas y exponerse al contagio, se ha preguntado.
CRÍTICAS A LA FALTA DE MATERIAL SANITARIO
Torra también ha censurado el reparto de material sanitario por parte del Ejecutivo y ha exigido que se fije un criterio transparente y justo para una distribución equitativa de recursos.Esa crítica la ha suscrito «el 100%» de los presidentes regionales, incluidos los del PSOE, según fuentes populares.
«Todos están centrados en el material sanitario», agregan.También el lehendakari vasco, Íñigo Urkullu, quien esta vez no ha cargado la mano en las críticas al decreto. «El 100% de los presidentes dice no tener tests y el 100% de los presidentes dice no tener o tener poquísimo material, es una queja unánime», opinan las fuentes del PP.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, le ha dicho a Sánchez: «Echamos de menos claridad y concreción. Se han dado contradicciones en criterios sanitarios». En las comunidades que gobierna el PP comienza a fraguar un enfado notable con el mando único por su gestión del material sanitario.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha adelantado que el Gobierno regional ha contratado un avión cargado con material sanitario que partirá desde China, con destino a la capital de España, en ayuda de los hospitales madrileños para afrontar las carencias por la crisis del coronavirus (COVID-19). «¿Puede asegurarme que no bloqueará el pedido con material de la Comunidad de Madrid preparado en Shangai?, ha preguntado Díaz Ayuso al presidente del Gobierno.
Ayuso también ha solicitado que se envíen a Madrid 2.000 sanitarios de otras comunidades autónomas para afrontar el coronavirus, que se sumen a los 5.000 contratados de refuerzo por el Gobierno regional. Y ha pedido 1.000 efectivos más para los centros de mayores y medidas más contundentes en el terreno económico. «Ahora necesitamos medidas contundentes, de cortísimo plazo para mantener a las empresas con vida, a las pymes y a los autónomos». Es decir, una ventanilla ilimitada de liquidez.
En privado, los barones populares basculan entre llamarlo «desastre de gestión» o «negligencia». «Teníamos proveedores y encargos y se pararon. Por eso se trata de un problema de arriba», del Gobierno nacional, critican.
Los presidentes socialistas también han reclamado «que se abastezca a todas las comunidades, porque es una prioridad». Con un tono constructivo y ofreciendo «colaboración», han incidido en que les «falta material».
La prórroga del estado de alarma ha sido aceptada por los dirigentes autonómicos. En palabras del valenciano Ximo Puig para que estos nuevos 15 días no se conviertan en otros 15 más. Puig ha pedido que todos los partidos actúen con corresponsabilidad, trasladando a los ciudadanos un mensaje claro.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha demandado a Pedro Sánchez cambiar el protocolo del Ministerio para hacer los test rápidos de detección del coronavirus cuanto antes y de manera masiva y que se realicen de manera homogénea en toda España.Y comprar todos los respiradores que sean posibles. Page ha planteado que las comunidades puedan adquirir su propio material. Además, en la línea de otros dirigentes, de distinto color político, ha insistido en que el Gobierno reflexione en la conveniencia de endurecer las restricciones a la circulación de personas.
