Renfe no acepta cambiar el horario del AVE de las 7.05 horas a Madrid

Renfe se negó ayer a modificar el horario del AVE de Zaragoza a Madrid de primera hora de la mañana, que desde el pasado día 17 de septiembre sale a las 7.05 horas y llega a la capital de España a las 8.50. Hasta ahora lo hacía a las 8.40, que lo hacía más práctico para los desplazamientos por negocios que se hacían para acudir a reuniones de trabajo, pero la compañía ferroviaria ha sustituido este tren por el modelo AV City, que desarrolla menor velocidad.

Este doble cambio de horario y tipo de tren generó un gran malestar en la Cámara de Comercio de Zaragoza, la organización empresarial CEOE, el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza, cuyos representantes se sentaron ayer a la mesa en una reunión con responsables de la operadora con el fin de volver al sistema anterior, con un AVE más rápido, con más capacidad y que llega a las 8.40 horas a destino.

«Renfe aduce que la ocupación que registra este servicio no es muy elevada y que por ello ha procedido al cambio, pero nosotros mantenemos que es necesario hacer un seguimiento para ver cómo evoluciona la demanda», subrayó José Miguel Sánchez, director general de la Cámara de Zaragoza. «De hecho, a las ocho de la mañana de hoy ya no había billetes», agregó.

Sánchez explicó que se creará una comisión bilateral, en la que también se sienta Renfe, que estará pendiente del grado de utilización del tren de las 7.05 durante los tres próximos meses. Si al cabo de ese tiempo «no hay avances significativos», los participantes en la mesa de negociación valorarán realizar una declaración institucional.

«Con el AVE de las 7.05 no vamos a ser flexibles», recalcó el representante de la Cámara de Comercio. «No es lo mismo llegar a Madrid a las 8.40 que a las 8.50», explicó. «Si llegas 20 minutos antes de las nueve de la mañana, queda margen para estar en una reunión que empieza a esa hora y, además, hay bastante menos tráfico, lo que facilita el desplazamiento», añadió.

PLAZO DE 20 DÍAS

Las quejas no solo hacen referencia a la menor velocidad, la reducción de plazas y los diez minutos de retraso. También hay malestar por el hecho de que el nuevo convoy del AV City carece de cafetería.

Con todo, pese al frustrante resultado de la reunión de ayer, Sánchez señaló que Renfe tendrá un plazo de 20 días para estudiar la situación con vistas a celebrar otro encuentro. La finalidad es que la operadora reconsidere su postura.

La concejala de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Zaragoza, Carmen Herrarte, que asistió a la reunión, criticó una medida que calificó de «unilateral y adoptada sin nuestro conocimeinto previo». «Afecta muy gravemente a la competitividad de Zaragoza» y asimismo genera «pernoctaciones» y dificultades en la conciliación familiar», insistió la responsable municipal, que al comienzo del encuentro mostró su deseo de que «Renfe rectifique».