Las cuotas de los autónomos subirán cinco euros al mes a partir del 1 de enero

El Gobierno ha cerrado este miércoles con los autónomos el pacto para elevar sus cuotas a la Seguridad Social y reforzar sus prestaciones. A partir del 1 enero la cotización en la base mínima, por la que contribuyen el 85% de estos trabajadores, subirá 5,35 euros al mes. Además, el acuerdo contempla mejoras sustanciales: duplica el periodo durante el cual se puede recibir la prestación por paro; crea una tarifa plana de 24 meses para las madres tras la baja de maternidad y permite que no se pague la cuota desde el segundo mes de incapacidad por enfermedad. También se multará con hasta 10.000 euros a las empresas que empleen falsos autónomos.

El trasvase de un empleado desde el régimen de asalariado al de autónomo sin que esté justificado tendrá una multa de entre 3.126 y 10.000 euros por cada falso autónomo. Así figura en el borrador de real decreto ley que ha adelantado este miércoles Cinco Días y cuya aprobación prepara el Gobierno para el viernes. En él se incluye la revalorización este año de las pensiones según una inflación del 1,7% —lo que implica una paga compensatoria del 0,1% tras haberse subido ya en los Presupuestos un 1,6%— y el pacto con los autónomos para cotizar a partir del 1 de enero 5,35 euros más al mes en la base mínima o 63,6 euros más al año. La cuota mínima de los autónomos societarios subirá 6,89 euros al mes o 82,68 al año.

La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha presentado este miércoles el acuerdo de subida de cotizaciones para los trabajadores por cuenta propia junto a sus representantes: Lorenzo Amor de Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Eduardo Abad, de la Unión Profesional de Trabajadores Autónomos (UPTA), Pedro Barato, de Asaja, y María José Landaburu, de la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE). Con este consenso se evita equiparar la subida de cotizaciones del autónomo a la que tendrá en 2019 el régimen general (del 22,3% en la base mínima) al elevarse el salario mínimo. Así, los trabajadores por cuenta propia tendrán en 2019 una subida del 1,25% de la base mínima, por la que ahora cotiza el 85% de los autónomos y que hasta el momento se situaba en los 932,7 euros. Y un aumento del tipo que se aplica sobre esa base desde el 29,8% hasta el 30%. Un incremento de dos décimas que, junto a la subida de la base mínima, supondrá un desembolso de 5,3 euros más al mes. Si el autónomo decide cotizar por una base superior, entonces la subida del tipo en dos décimas se aplicará sobre una cantidad mayor y la cifra del recargo resultante también será algo mayor.

En todo caso, la cotización mínima de los autónomos quedará en 2019 en torno a un 15% más barata que la de un asalariado que cotice por lo mínimo, lo que podría suponer un incentivo a traspasar a los trabajadores desde un contrato por cuenta ajena a uno por cuenta propia con tal de ahorrar en el pago de cuotas. Por este motivo, el Ministerio de Trabajo creará nuevas tipos de infracciones con multas de entre 3.126 y 10.000 euros por trabajador contratado como falso autónomo. Aunque en el real decreto solo figura la multa por el trasvase de un contrato como asalariado a un autónomo, fuentes presentes en la reunión explican que la normativa se endurecerá para que afecte a todas las contrataciones fraudulentas de autonómos. Hasta ahora la inspección solo obligaba a la empresa a pagar la diferencia en cotizaciones y regularizar el contrato. Pero realmente no se aplicaban sanciones. No obstante, el limitado número de inspectores puede hacer difícil que esas nuevas multas obtengan resultados.

Por otra parte, se incrementa la tarifa plana de los 50 a los 60 euros mensuales. Y se mejora la prestación de paro de los autónomos duplicando sus periodos de duración, que antes estaban entre 2 y 12 meses según se había contribuido y que ahora podrán durar desde los 4 meses hasta los 24. También se permite que las madres autónomas puedan pagar una tarifa plana de 60 euros en los 24 meses posteriores a la baja de maternidad.

En el caso de baja por enfermedad, los trabajadores por cuenta propia podrán no abonar la cuota a la Seguridad Social a partir del segundo mes de incapacidad. «Se trata de un buen acuerdo porque los autónomos podrán cuidar de su salud y coger las bajas. Además, nadie esperaba un pacto así hace tan solo dos meses», señala Eduardo Abad.

El tipo de cotización para los autónomos se fija en el 28,30% por contingencias comunes, que ya incorpora la incapacidad temporal por enfermedad común y accidente no laboral y que queda igual que en el régimen general; en el 0,9% para las contingencias profesionales como una enfermedad o accidente de trabajo, un tipo inferior al del régimen general; en el 0,7% para el cese de actividad conocido como paro de los autónomos y cuya contribución será menor que la que se da en el régimen general, y en el 0,1% la de formación y prevención. En total, se situará en el 30%. Y todo se hará obligatorio, no como sucedía antes, que existía la opción de no cotizar por las contingencias profesionales y el cese de actividad.

Los incrementos de tipos se harán de forma escalonada por años: en 2019 será del 30%; en 2020 del 30,3%; en 2021 del 30,6% y en 2022 del 31%. Además, Trabajo se ha comprometido a aprobar durante 2019 un sistema por el cual los autónomos coticen según sus ingresos reales. Para ello prepara un cruce de datos de la Tesorería de la Seguridad Social con los de la Agencia Tributaria.

Según explica Lorenzo Amor, antes el tipo estaba en el 29,8% para los que no cotizaban por cese de actividad y contingencias profesionales. Y se colocaba en torno al 33% dependiendo del tipo de riesgo profesional para aquellos que sí contribuían. De modo que en 2019 habrá unos 550.000 autónomos que sí cotizaban por riesgos profesionales y paro que incluso pagarán menos que en la actualidad: un 30% en lugar de cerca de un 33%. El colectivo total de autónomos asciende a unos 2,5 millones de trabajadores.

PENALIZACIÓN A LOS CONTRATOS DE MENOS DE UNA SEMANA

El borrador de real decreto ley que se aprobará este viernes en el Consejo de Ministros y que tiene que ser convalidado en el Congreso contempla un endurecimiento de las penalizaciones que se aplican a los contratos que duran menos de una semana. Ya existe un incremento del 36% de la cotización para esas contrataciones. Y ahora el Gobierno prevé subirlo hasta el 40%. «Así no habrá la tentación de que el fin de semana no se cotice por esos trabajadores», ha declarado la ministra Magdalena Valerio, quien sin embargo todavía no lo confirma a la espera de que pase por el Consejo de Ministros. Además, la nueva normativa hará que esos días por debajo de la semana cuenten como 1,4 jornadas cotizadas para el trabajador, de forma que no se vean perjudicados en sus derechos por la excesiva rotación.

Por último, el texto deroga la revalorización del 0,25% de las pensiones y  amplía en un año (hasta el 1 de enero de 2020) la posibilidad de que las personas despedidas antes del 1 de abril de 2013 o que se acojan a un ERE abierto antes de esa fecha se puedan jubilar de forma anticipada sin las penalizaciones que se establecieron ya en 2011.