Seis momias del British Museum abren el fascinante Antiguo Egipto en CaixaForum Zaragoza

La exposición «Momias de Egipto. Redescubriendo seis vidas» se podrá ver desde este miércoles y hasta el 2 de junio

Nesperennub fue un sacerdote del templo de Karnak, el más importante de Tebas, y Takhenemet una mujer casada que también vivió allí en el 700 a.C y a la que enterraron con un sistro, un instrumento parecido a un sonajero. Junto a otro sacerdote, un niño, un joven del Egipto grecorromano y un funcionario estos individuos, que vivieron entre el 800 a.C y el 100 d.C adentrarán a los asistentes en el CaixaForum en el fascinante Antiguo Egipto con la nueva exposición que llega desde este miércoles y hasta el 2 de junio a Zaragoza. Se trata de la séptima colaboración entre el espacio expositivo y el British Museum y la capital aragonesa es la última parada de una muestra que ha recorrido buena parte del territorio nacional.

Con sus sarcófagos, objetos personales como diademas, joyas y hasta juguetes y cosas sorprendentes como frutas y hasta restos de migas de pan de hace 7.000 años, estas momias contarán sus historias de vida y permitirán a los visitantes conocer, por ejemplo, cuál fue el papel de la mujer en el valle del Nilo, cómo se preparaban los individuos para llegar al más allá, la importancia de la música o incluso esos inicios de la peluquería (la mujer aparece momificada con un moño) y de la cosmética. Todo ello utilizando una tecnología puntera, tal como han explicado los comisarios de la exposición, Daniel Antoine y Marie Vandenbeusch, que ha permitido, por primera vez, ver las momias desenvueltas virtualmente.

Mediante la tomografía computarizada se han realizado algo similar a un TAC a los cuerpos momificados para obtener información sobre, entre otros aspectos, su edad, su estatura o la causa de la muerte. Esto permitirá conocer a los visitantes que, por ejemplo, prácticamente todas las momias padecían una mala salud dental o que los adultos fallecieron por patologías cardiovasculares e incluso cáncer, lo que evidencia la antigüedad de esta enfermedad. También se podrá descubrir algo tan cotidiano, y a la vez complicado, como la alimentación en el Antiguo Egipto en la que la carne era un lujo que solo se disfrutaba en ocasiones especiales y el pan, la cerveza y frutas y verduras como dátiles o higos eran las comidas principales.

«El clima seco de Egipto nos ha permitido tener un grado de conservación óptimo que, por ejemplo, en la arqueología europea no se presenta. En la exposición podemos ver restos de pan de 7.000 años de antigüedad o algunas frutas y también documentos insólitos como acuerdos de divorcio que se han preservado gracias al clima», ha explicado el comisario de la exposición, Daniel Antoine.

Con una simbiosis perfecta entre ciencia y cultura, los amuletos y demás enseres que se descubrieron en yacimientos y tumbas pertenecientes al museo londinense, permitirán saber en quién creían, cuáles eran los oficios o la cotidianidad de la vida de los seis individuos momificados. Los colores y formas de los sarcófagos también habla de su riqueza o su clase social y adentrarán a los visitantes en estos cuerpos que, al fin y al cabo, fueron personas.

«Los descubrimientos que se han hecho del Antiguo Egipto son fascinantes y es algo que siempre ha despertado la curiosidad. Lo que hemos pretendido con esta muestra es presentar a seis personas que vivieron en el valle del Nilo, conocer una sociedad que era muy distinta pero que al fin y al cabo no está tan alejada porque seguimos compartiendo muchos problemas hoy», ha dicho la comisaria, Marie Vandenbeusch.

De manera paralela a la exposición se han organizado visitas guiadas, proyecciones, charlas y actividades especiales que se podrán consultar en la página web de CaixaForum Zaragoza. Todo para adentrarse en el fascinante Antiguo Egipto.