Egipto e Israel, con mediación de Estados Unidos y Qatar, han negociado este sábado la evacuación de extranjeros residentes en Gaza y palestinos con doble nacionalidad a través del paso de Rafah, fronterizo con Egipto. Una medida que se produce cuando expira el ultimátum del ejército israelí para que 1,1 millones de gazatíes abandonen el norte de la Franja, en previsión de una operación terrestre israelí.
Fuentes del ministerio de Exteriores español, sin embargo, se han negado a proporcionar información de las gestiones en marcha para permitir la salida de extranjeros, que incluirían a estadounidenses, europeos, canadienses o chinos. A pregunta de El Independiente, el ministerio que dirige el socialista José Manuel Albares alega «motivos de seguridad» para no informar de los procesos de evacuación.
Tampoco facilitan el número de ciudadanos españoles que podrían estar afectados por la evacuación en Gaza, con una población cercana a los 2,2 millones de personas. Se limitan a señalar que el número de españoles registrados se sitúa en torno a los 10.000 entre Israel y Territorios Palestinos, «de los que unos 1.000 ya habrían salido a España», precisan.
Hamás informa de la muerte de 9 rehenes
Fuentes gubernamentales egipcias aseguran haber pactado con Israel la apertura del paso fronterizo de Rafah, la única vía de salida en Gaza no controlada por Israel, exclusivamente para extranjeros o palestinos con doble nacionalidad. El cruce podría abrirse la tarde de este sábado, pero la información es escasa.
Hay fuentes que indican que la apertura ha quedado cancelada o aplazada en mitad de la evacuación del norte de Gaza y los bombardeos del ejército israelí en represalia por los ataques de Hamás el pasado sábado. También ha continuado este sábado el lanzamiento de cohetes por parte de las Brigadas de Al Qassam, el ala militar de Hamás, en el sur de Israel. En un escueto comunicado, el brazo armado de Hamás ha informado de la muerte de 9 rehenes, cuatro de ellos extranjeros, a consecuencia de los bombardeos llevados a cabo por Tel Aviv durante las últimas 24 horas.
Según las últimas informaciones, los extranjeros que se han desplazado hasta el puesto fronterizo siguen esperando la luz verde para cruzar hacia Egipto, donde se ha desplegado ya una caravana de ayuda humanitaria en caso de recibir el plácet para poder acceder a Gaza. Países árabes como Jordania o Arabia Saudí han solicitado este sábado un inmediato alto el fuego para proteger a una población civil que está huyendo en masa del norte de Gaza en mitad del asedio total de la Franja, en la que el suministro de agua, electricidad o comida se halla cortado. «Sólo en las últimas 12 horas, cientos de miles de personas han sido desplazadas», alertó la Agencia de la ONU para los Refugiados en la plataforma X.
A primera hora de este sábado Tedros Adhanom, director general de la Organización Mundial de la Salud, ha informado que un avión con suministros médicos ha aterrizado en Al Arish, cerca del paso fronterizo de Rafah con Gaza. «Estamos listos para desplegar los suministros en cuanto se establezca el acceso humanitario a través del cruce. Seguimos pidiendo a Israel que reconsidere la decisión de evacuar a 1,1 millones de personas. Será una tragedia humana», ha insistido.
