“Una infección respiratoria más”. Con esas palabras ha explicado el director general de Salud Pública en Aragón, Francisco Javier Falo, que la Covid19 deja de ser una enfermedad de declaración individualizada y que pasará a tratarse con modelos sanitarios con los que ya trabajan desde el Departamento de Sanidad.
Tres años después, se pone fin a la emergencia sanitaria que desencadenó esta enfermedad. De este modo, y ante el nuevo escenario, se vuelve a la situación anterior a la crisis sanitaria y quedan sin vigencia todas las medidas que se establecieron en su momento: distancia de seguridad interpersonal, uso obligatorio de mascarilla en determinadas circunstancias y consumo de tabaco en espacios al aire libre.
Así, se establece un periodo de transición hacia un nuevo manejo de la enfermedad a largo plazo. En este, sigue siendo obligatorio notificar los brotes en las residencias y, durante los próximos años, se conformarán las políticas de vacunación, tal y como ha recordado el director general de Salud Pública.
Junto Falo, la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, y el director del Salud, José María Arnal, han hecho balance de lo que han supuesto para la Comunidad estos años. El 11 de marzo se declaró la pandemia. El 5 de mayo de este mismo año, el director de la Organización Mundial de la Salus (OMS) indicó que la Covid dejó de ser considerada una emergencia. Finalmente, este martes, 4 de julio, el Consejo de ministros ha puesto fin a la crisis sanitaria.
“La pandemia atacó con especial virulencia en Aragón”, ha explicado la consejera. Tras dos días de la considerada “nueva normalidad”, se declaró la “ola de los temporeros”. Según Repollés, esta ha sido una pandemia “con una ola más en Aragón”, concretamente, con nueve. Fue la primera la que -explica la consejera- “más lastró” a la Comunidad, pero que, “aún así, el sistema sanitario aguantó”. A partir de la segunda ola, la repercusión disminuyó. A pesar de ello, en Navidad de 2021 fue el momento en el que más contagios se declararon, con la variante Ómicron. A partir de septiembre de 2022, los indicadores se han mantenido estables y se puede considerar que la crisis sanitaria “está finalizada”, ha detallado Repollés.
Con todo, 5.304 personas han muerto en nuestra Comunidad, ha habido más de 28.000 hospitalizaciones y 1.300 ingresos en la UCI. En total, se han declarado 469.959 casos de Covid, aunque Repollés ha explicado que “son muchos más”, pero que no todos se han contabilizado. Más de un millón de PCR, 302.000 pruebas serológicas y 868.000 test de antígenos son los que se ha realizado la población aragonesa. Y destaca que, desde que el 27 de diciembre de 2020 se administrase la primera vacuna en una residencia de la capital, se han suministrado más de tres millones de dosis. “España es el país más modélico de la Unión Europea y del mundo en gestión de la pandemia”, ha apuntado la consejera. Desde el Departamento de Sanidad del Gobierno autonómico, también han querido destacar que fue Aragón “la primera Comunidad que dispuso de un certificado propio que permitía que viajáramos por Europa” y que han sacado adelante 126 iniciativas legislativas para atajar contagios, que quedan anuladas desde hoy.
A pesar del fin de la emergencia sanitaria, han pedido prudencia a la ciudadanía y actuar “con sentido común”.
