Apenas unas horas después del terremoto que ha sacudido a Siria y Turquía, los equipos internacionales de rescate ya se han puesto en marcha hacia la zona, cargados con todo el material necesario para resistir días sobre el terreno de forma autónoma y el equipo de búsqueda y salvamento.
Desde España, la primera formación de bomberos y sanitarios tiene prevista su salida a las 18 horas desde Madrid en vuelo directo a Estambul, donde deberían llegar si no hay retrasos en torno a la medianoche. Son 13 especialistas procedentes de todo el país, entre los que se cuentan tres bomberos del Consorcio Provincial de Córdoba, según ha detallado a ABC el jefe del destacamento, Antonio García.
Llevan con ellos cuatro perros especializados en la localización de personas vivas, una operación en la que la rapidez de respuesta es fundamental en este tipo de catástrofes en las que hay derrumbe de edificios. El Gobierno turco lo sabe y por eso ha solicitado y aprobado de forma inmediata la ayuda internacional para la búsqueda de supervivientes. Según García, «los gobiernos normalmente son reacios a este tipo de acciones, pero esta vez han sido rápidos».
El equipo español no buscará víctimas mortales, sino personas atrapadas entre los escombros. Los cuatro perros que llevan «sirven para detectar personas vivas. No buscamos muertos porque lo prioritario son los vivos; donde estén sepultados hay que buscarlos«, declara el jefe del operativo.
En Turquía se cuentan ya por cientos las viviendas abatidas. El país tiene experiencia en este tipo de catástrofes, pero aun así el terremoto ha sido de tal magnitud que se necesita la ayuda internacional. El jefe del primer equipo de especialistas recuerda que ya estuvo en Anatolia en el año 2000, pero «aquello no fue nada comparado con lo que hay ahora. Son 1.700 edificios derrumbados«.
Una vez en Estambul, donde se ubicará el primer centro de crisis, «vamos a valorar cómo está la situación y dónde es más optima nuestra intervención, siemrpe en coordinación con la autoridades locales«, apunta Antonio García. Después tendrán que decidir si se trasladan hasta el centro de la tragedia por tierra, en vuelos comerciales o incluso con el apoyo del ejército turco.
Una vez en el terreno, los especialistas españoles no necesitan más apoyo de las autoridades locales, ya que llevan todo lo necesario para sobrevivir y trabajar durante un par de semanas, desde la comida hasta el alojamiento en tiendas de campaña. «Somos totalmente independientes para no ser una carga más para el Gobierno«, explica el bombero.
Entre el material que transportan se incluyen percusiones para accesos verticales, cámaras térmicas o equipos de detección de personas. Los tres bomberos cordobeses son Salvador García (del parque de Puente Genil), Antonio Caballero (Baena) y José Gregorio Martín (Priego). El Consorcio Provincial de Bomberos también ha trasladado dos de los cuatro perros de rastreo de personas vivas. Son ‘Bolo’, un pastor belga malinois, y ‘Jako’, un patterdale terrier.
Para garantizar una movilización inmediata de los equipos de rescate, el material necesario permanece todo el año empaquetado y se le realizan revisiones cada 15 o 20 días para comprobar que todo está en perfecto orden. Por eso se la reacción de los efectivos españoles ha sido prácticamente inmediata.
Cuestión aparte es el equipo humano, que se forma en tareas de rescate a lo largo de todo el año. Los bomberos y sanitarios que trabajan en las operaciones internacionales de rescate lo hacen en su tiempo libre, de forma voluntaria y no cobran nada por ello, manifiesta Antonio García. Durante varias semanas tienen que dejar a sus familias para acudir a donde más se les necesita.
