Los obispos cargan contra la legislación «contraria a la razón, a la naturaleza y a la vida» del Gobierno

La Conferencia Episcopal publica un documento en el que hacen balance de las leyes aprobadas por el Ejecutivo de Sánchez

La Conferencia Episcopal ha hecho público un documento en el que analiza la sociedad española desde «la fe Dios y la perspectiva del bien común», y en el que ofrece un instrumento de trabajo, dirigido a los católicos, sobre «persona, familia y sociedad». El documento, aprobado en la anterior Plenaria de la Conferencia Episcopal hace un amplio repaso a los cambios legislativos propiciados por el Gobierno de Pedro Sánchez en los últimos años, a los que considera contrarios «a la razón, a la naturaleza y a la vida».

En el documento, los obispos condenan la filosofía ‘woke’ y el intento de «construcción de un nuevo modelo social, para lo que es preciso ‘deconstruir’ lo esencial del sistema vigente». En ese sentido condenan «la reciente legislación que se extiende por el mundo actual totalmente contraria a la razón, a la naturaleza y a la vida: aborto, divorcio, matrimonio homosexual, experimentación con embriones humanos, gestación subrogada, transexualidad...». Unos planteamientos que, según el documento, «desde poderosos organismos financieros globales se imponen a los gobiernos».

El texto también valora la «ideología de genero como» como «otro elemento clave del ambiente cultural« que afecta a la »esencia de la familia«. »Como toda ideología, intenta crear la realidad e imponerla de forma irracional», explica el texto.

El documento ha sido presentado en la mañana por Luis Argüello, arzobispo de Valladolid y anterior secretario general de la Conferencia Episcopal, después de que fuera aprobado el pasado noviembre, en la Asamblea Plenaria. El objetivo del texto, según ha planteado es compartir las reflexiones del Episcopado «con los miembros de la Iglesia y con la sociedad española, partiendo de la mirada sobre la actual situación cultural, social y política». Además, también plantea «estimular la reflexión y el diálogo sobre asuntos de especial importancia para la vida eclesial y social».

En ese sentido, ha acarado que «no se trata, por tanto, de un nuevo documento doctrinal o pastoral de la Conferencia Episcopal, sino de una invitación a la reflexión por parte de todos, en un momento de convergencia de múltiples acontecimientos, políticos, económicos y culturales expresión de una gran transformación que afecta a la trasmisión de la fe y a la convivencia en nuestra sociedad».

Según ha recordado Argüello, el documento parte de la afirmación del Papa Francisco de «no estamos viviendo simplemente una época de cambios, sino un cambio de época». En ese sentido, analiza los «cambios profundos» que se están generado en la sociedad, a la par que hacen un análisis más específico de la actual situación política española.

El documento comienza con una presentación de la antropología cristiana y del Magisterio eclesial, desde el Concilio Vaticano II a los documentos de los tres últimos Papas: Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco.

Así valoran los obispos las leyes

«Ha sido aprobada una nueva ley educativa que sigue la línea constructivista vigente en España desde la LOGSE y de adecuación a las necesidades del sistema económico y de las mayo- rías políticas. Un pacto educativo por el bien común sigue pareciendo imposible. La LOMLOE avanza en la disminución del derecho de las familias a decidir el modelo educativo para sus hijos y en la incorpora- ción de elementos ideológicos respecto a la antropología y la historia al tiempo que disminuye la importancia de asignaturas humanistas como la enseñanza religiosa escolar. Otras leyes aquí referidas incorporan propuestas educativas muy marcadas por las antropologías emergentes y reducen la libertad de los padres a la hora de aceptar o no esas pro- puestas formativas«.

«Ha sido aprobada la Ley de protección de la infancia que tiene muchos aspectos positivos, pero reafirma una débil valoración de la familia con una comprensión de la persona como individuo sobre el que el Estado, so capa de protegerlo, tiene cada vez más poder de decisión. También insiste en incorporar la visión antropológica propia de la ideología de género«.

«Está a punto de ser aprobada la modificación de ley del aborto para hacerlo todavía más fácil, restringir la objeción de conciencia e impedir la información a las madres gestantes sobre el drama del aborto y sobre otras propuestas para afrontar el embarazo y la problemática de todo tipo que estas mujeres pueden estar viviendo, desde la convicción de que la muerte de otro nunca es la solución al problema que puedan sufrir«.

«La llamada ley trans consagra definitivamente el sentimiento como categoría jurídica y radicaliza la disolución antropológica iniciada con la ideología de género. Su propuesta que absolutiza el derecho a decidir rechaza razonamientos científicos y médicos y prescinde de los datos de la naturaleza está provocando un debate social en muy diversos grupos. Es conveniente hacer caer en la cuenta a los que ahora rechazan esta ley que sus principios filosóficos dualistas y su concepción antropológica individualista están ya presentes en las anteriores leyes.

– La anunciada ley de nuevas realidades familiares es una norma que quiere recoger también lo sembrado con planteamientos culturales y legislativos anteriores. Al someter la familia al relativismo, a la radical autodeterminación y al sentimiento, se llama familia a cualquier tipo de relación, devaluando así la familia en la que esposos y padres coinciden que acoge, custodia y educa a los hijos que un hombre y una mujer han engendrado en la expresión de su amor».