El Gobierno y sus socios tumbarán otra iniciativa para endurecer los beneficios penitenciarios a etarras

Como era de esperar, el Gobierno ha vuelto a contar esta tarde con sus socios habituales para que no prospere en el Congreso la iniciativa del PP con tres objetivos fundamentales contra los presos de ETA: que éstos no accedan a acercamientos y terceros grados si no se arrepienten y colaboran con la Justicia, que las asociaciones de víctimas puedan participar en el proceso para oponerse a esos beneficios penitenciarios y que las delegaciones del Gobierno puedan prohibir los ‘ongi etorris’ u homenajes públicos con los que el entorno proetarra recibe a estos presos en municipios del País Vasco y Navarra cuando salen de la cárcel.

Así ha quedado patente en las intervenciones previas a la votación, que se producirá según lo previsto a última hora de esta tarde, sobre una iniciativa del PP muy similar a la que ya presentó en el Congreso otro grupo de la oposición, en este caso Ciudadanos hace tres meses, y que ha terminado igual: con PSOE y Unidas Podemos de la mano con los bildutarras, nacionalistas vascos y secesionistas catalanes para abortar esta proposición de ley.

La encargada de defenderla ha sido la portavoz del PP en la Cámara Baja, Cuca Gamarra, que ha dedicado sus primeras palabras a los representantes de los colectivos de víctimas presentes en la tribuna de invitados, como la AVT, Dignidad y Justicia y las Fundaciones Miguel Ángel Blanco y 11-M. También a los diputados que han sido víctimas del terrorismo etarra, como su compañero Jaume Mateu, además de Antonio Salvá y Francisco José Alcaraz, ambos de Vox.

Gamarra ha recordado que siguen sin resolverse hasta 378 atentados de ETA, lo que representa casi la mitad (44%) de los cometidos por la banda terrorista a lo largo de toda su historia. También ha señalado que, desde la llegada de Sánchez y el PSOE al Gobierno a mediados de 2018, se han producido 209 acercamientos de etarras, más de la mitad a favor de condenados por delitos de sangre, 25 terceros grados y 14 libertades condicionales, que permiten a los presos de ETA salir de la cárcel antes de cumplir su condena completa.

Por todo ello, la portavoz del PP considera «una obligación moral y colectiva hacer justicia y honrar la memoria de la víctimas«. Gamarra ha elevado el tono para denunciar que »Sánchez se ha asociado a los verdugos«, en alusión a Bildu, brazo político de ETA, »para alcanzar y mantenerse en el poder«. »No vamos a pasar por ahí«, ha sentenciado la portavoz popular respecto a la estrategia »inaceptable« de »votos por presos« que, según el PP, está detrás de los acuerdos entre el Gobierno y Bildu.

La iniciativa ha contado con el apoyo de otros grupos de la oposición como Vox, Ciudadanos y Foro Asturias (FA), aunque los dos primeros no se han ahorrado algunas críticas l PP. El propio Alcaraz (Vox) ha insistido en que «con todos los Gobiernos», tanto de PP como de PSOE, se han producido homenajes, acercamientos, «excarcelaciones injustificadas» y otros beneficios penitenciarios para etarras. Y ha denunciado que «el mayor homenaje a ETA son los cinco diputados de un partido etarra» que están sentados en el Congreso, señalando a los escaños de Bildu. Por su parte, Edmundo Bal (Cs) ha arrancado señalando que «ya era hora» de que el PP presentara una iniciativa «para recuperar la dignidad de las víctimas», algo que, según el portavoz naranja, impide la «polarización y guerra de trincheras» en la que están instalados PP y PSOE.

«El sello del PSOE»

El portavoz del PSOE en este asunto, Miguel Ángel González, ha presumido de la gestión de su partido en materia antiterrorista, llegando a jactarse de que «todo en este país a favor de las víctimas de ETA tiene el sello del PSOE». Y también lo ha hecho con su compañero y ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, «que se jugó la vida para defender la democracia y la libertad». Respondía así a los portavoces de PP y Vox, que han coincidido en pedir la dimisión o cese de Marlaska tras trascender durante los últimos días el informe de la Guardia Civil que revela la línea directa de la que goza el entorno proetarra con Instituciones Penitenciarias sobre beneficios para los presos de ETA.

En la misma línea, la representante de Podemos, Martina Velarde, ha ha descalificado a los populares al «pedirles decencia, algo que desconocen» y les ha acusado de «engañar» a las víctimas y «hacer politiqueo» con ellas. Los nacionalistas vascos, secesionistas catalanes y hasta bildutarras han intervenido con un tono bastante más moderado que los de ambos partidos del Gobierno (PSOE y Unidas Podemos).

Jon Iñarritu (Bildu) ha criticado los «criterios de revancha y venganza» que, según él, inspiran esta propuesta «inconstitucional» del PP y ha insistido en que «hace 11 años que desapareció ETA». El mismo argumento que, cada vez más, comparte la izquierda española para justificar y defender sus compromisos con el entorno proetarra y su brazo político. Mikel Legarda (PNV) también ha rechazo la propuesta del PP porque considera que permite a las víctimas «impedir, dificultar y entorpecer» el tratamiento penitenciario de los etarras. Genís Boadella (PDECat) denuncia que se trata de una propuesta «en caliente», aunque el PP la registró hace casi un año.