Putin avisa a Lukashenko de que cortar el gas a Europa afectaría a la relación entre Rusia y Bielorrusia

Los presidentes de Rusia y Bielorrusia coincidieron este sábado en culpar a los países occidentales europeos de la crisis migratoria que ha disparado la tensión en la frontera bielorrusa con Polonia.

Vladimir Putin negó que Moscú esté ayudando a orquestar el flujo de inmigrantes: «Quiero que todo el mundo lo sepa. No tenemos nada que ver con eso», declaró el presidente ruso al canal Vesti, que responsabilizó por unas políticas en Oriente Medio que a su juicio fomentan que los inmigrantes quieran ir a Europa, recoge Afp. «No debemos olvidar de dónde vienen estas crisis asociadas a los inmigrantes…fueron creadas por los propios países occidentales, incluidos los europeos», dijo.

En la misma línea, el presidente de Bielorrusia exigió pruebas de que esté alimentando una crisis migratoria en la frontera con Polonia.

«Que me pongan las pruebas sobre la mesa. Que me digan un solo responsable o un empresario que esté financiando esto», declar Alexánder Lukashenko al magacín ruso ‘Defensa Nacional’, en una entrevista en la que señala a la canciller alemana, Angela Merkel, como responsable al abrir las puertas del país a los migrantes.

Pese a la sintonía entre Putin y Lukashenko, el presidente ruso advirtió ayer a su homólogo bielorruso de que sus amenazas de cortar el gas a Europa como medida de presión podrían ser contraproducentes hacia su relación con Moscú. En una entrevista con la cadena Rossiya 1 recogida por Ep, indicó que esta medida «causaría un gran daño al sector energético de Europa, y no contribuiría al desarrollo de nuestras relaciones con Bielorrusia», indicó en una entrevista con la cadena Rossiya 1.

Hallan muerto a un joven sirio

Entre tanto, el cadáver de un joven sirio fue hallado cerca de la frontera entre Bielorrusia y Polonia, informó la Policía polaca. «El cuerpo de un joven de nacionalidad siria fue descubierto ayer, en el bosque, cerca de Wolka Terechowska», indica el comunicado policial.

«Las causas de la muerte no han podido ser determinadas en el lugar mismo», añade el texto. Esta muerte elevaría a 11 el número de víctimas mortales de la crisis migratoria.