Zidane conoce al detalle la revolución que prepara el Real Madrid

Zidane ha sido informado de la reforma total del equipo que el Real Madrid desea ejecutar. La casa blanca espera que él dirija el cambio. Se le considera el mejor entrenador posible, pues conoce la entidad, su idiosincrasia, la presión que se aguanta y los entresijos relacionados con el equipo más famoso del mundo.

Hay un segundo capítulo en esta predilección de la institución: no hay otro técnico que convenza de verdad a la dirección deportiva madridista. Si el francés se marchara, habría que elegir uno, pero el objetivo principal es que siga.

En el Real Madrid no convence demasiado Allegri, que está a punto de firmar por el Nápoles. Joachim Low tampoco es el idóneo. Ni otro entrenador

hipotético. En todos los casos no conocen bien ni el fútbol español, ni la casa, y no se les valora como las mejores opciones para llevar a cabo esta gran reforma general de la plantilla.

Tampoco es lo ideal quemar ahora a Raúl para hacer una remodelación total, cuando nunca ha entrenado a un equipo de Primera. Si Zinedine se fuera y no viniera otro técnico foráneo, Raúl sería el elegido, pero se prefiere que no sea ahora.

Esta semana que se ha tomado de vacaciones se interpreta cómo un paso adelante para continuar. No se considera lógico que tuviera al club pendiente durante siete días para decir después que no sigue

El Real Madrid ya ha expuesto a «ZZ» con detalle la revolución que viene. El marsellés conoce los objetivos de la entidad para fichar y desprenderse de jugadores y la casa le ha pedido que lidere este cambio.

Por supuesto, el francés podrá decidir que algunos futbolistas se queden, porque los quiere, y que algunos vengan o no, pero habrá alerta roja sobre varios nombres que la entidad no quiere que sigan en ninguna situación. Son los casos de Marcelo, Isco y Bale y Ceballos.

El Real Madrid espera la respuesta de Zidane para comenzar a hacer la revolución. Esta semana que se ha tomado de vacaciones se interpreta cómo un paso adelante para continuar. No se considera lógico que tuviera al club pendiente durante siete días para decir después que no sigue. Sería hacer perder el tiempo a la empresa que le paga.