Concha Ferrer: «Ha habido un deterioro importante en la salud de los sanitarios, tanto físico como mental»

 La presidenta del Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza, Concha Ferrer, reconoce que «ha habido un deterioro importante en la salud de los profesionales, tanto físico como mental». La covid ha provocado ya en Aragón 124.151 contagios y 3.501 fallecimientos, cifras que siguen aumentando. Una emergencia sanitaria de tal nivel ha supuesto una exigente carga entre el personal sanitario, que lleva más de 14 meses volcado en esta lucha.

Una opinión que avala un estudio realizado a nivel nacional por un equipo de investigadores de la Fundación Galatea, la Organización Médica Colegial y Mutual Médica, cuyos datos se pueden extrapolar a Aragón: un 33% de los facultativos tiene problemas para conciliar el sueño y un 27% duerme menos de seis horas. Además, uno de cada cuatro recurre a servicios de apoyo a la salud mental o se lo plantea para hacer frente al malestar emocional y al agotamiento mental acumulados. La mitad afirma sentirse «sobrepasado» y menos preparado física y emocionalmente ante nuevas olas, ya que se van enfrentando a ellas sin haber podido recuperarse de las anteriores y, en consecuencia, se registra un incremento del consumo de tranquilizantes e hipnóticos.

El Colegio de Médicos de Zaragoza prevé ofrecer un servicio de atención telefónica para que los profesionales reciban ayuda de psiquiatras y, si fuera necesario, pudieran continuar con el apoyo en la consulta. «Hay unidades –asegura Ferrer– que no han tenido ni un minuto de tranquilidad», como las ucis. Hay que recordar que la ocupación de los cuidados intensivos con pacientes covid supera el 25% en Aragón:»Esto estresa mucho al personal. Son situaciones muy complejas y excesivamente extendidas en el tiempo».

Aunque los profesionales se han sentido apoyados por sus compañeros y equipos en los peores momentos de la crisis, dos de cada cinco facultativos se ha planteado adelantar la jubilación cuando llegue el momento. Según resume la presidenta del Colegio de Médicos de Zaragoza, esto agravará la falta de personal, como en el caso de Atención Primaria, afirma, donde «el número de jubilaciones que va a haber será alto». «La sanidad no se puede improvisar, hay que planificarla. Es un gran problema y no se ha hecho nada hasta que ha aparecido una pandemia y se ha desmoronado todo», ha indicado.