En un ejercicio de «huida de la burbuja política», la líder de Ciudadanos (Cs), Inés Arrimadas, ha criticado la «propaganda» vacía de contenido que a su juicio ha protagonizado este miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde la tribuna de oradores del Congreso, en el debate sobre el estado de alarma y sobre el plan de recuperación económica.
En su intervención inicial, cercana a la hora de duración, Sánchez ha insistido en su intención de no volver a prorrogar el estado de alarma, pero no ha explicado ni las restricciones que se aplicarán en España a partir del 10 de mayo ni qué datos avalan que, en pleno inicio de la cuarta ola del coronavirus, se abandone la herramienta jurídica que ha permitido aplicar en los últimos meses cierres perimetrales y toques de queda.
Arrimadas ha evitado el tono bronco empleado por el líder de la oposición, el popular Pablo Casado, y ha esquivado debates colaterales sobre la II República -hoy es el noventa aniversario de su proclamación-, reivindicada por Sánchez y criminalizada después por el líder de Vox, Santiago Abascal. «Ha venido a reivindicar la proclamación de la II República con el claro objetivo de situar a todos en un bando, pero hay muchos españoles que se sienten identificados con una tercera España».
Al margen de ese comentario, la líder de los liberales se ha limitado a criticar asuntos relacionados con la gestión de la pandemia y de las ayudas por el Covid-19, a la vez que ha exigido al presidente que exponga un plan para el escenario que se abrirá el 10 de mayo si finalmente decae el estado de alarma, cuya prórroga vence el día 9. A Sánchez le ha pedido cuatro cosas: que asuma el liderazgo de las restricciones, como ha hecho Angela Merkel en Alemania; que garantice la protección a los más golpeados por la crisis del coronavirus; que consensúe las medidas con la oposición y las comunidades autónomas; y que asegure un buen reparto de los fondos europeos.
«¿Cuál es el modelo del reparto de las ayudas? ¿El modelo Plus Ultra del que se ha negado a dar explicaciones? ¿Cómo explica usted la vergüenza del caso Plus Ultra?», le ha preguntado Arrimadas, y ha apostillado que los 53 millones de euros recibidos por la aerolínea podrían haber cubierto 200.000 cuotas de autónomos.
«Usted cada vez que viene aquí hace propaganda. Pero la propaganda no llena la cuenta corriente de los españoles. La propaganda no llena la nevera de los españoles», ha sentenciado Arrimadas, muy crítica. Ha solicitado a Sánchez que además de «’Mister’ Vacunas» sea también «’Mister’ Restricciones» y no delegue en las comunidades autónomas la toma de decisiones desagradables. «Es verdad que hay motivos para la esperanza con las vacunas», ha admitido Arrimadas, pero ha añadido: «Pero aún quedan muchos sanitarios luchando en primera línea, muchas familias sin verse y muchos negocios cerrando».
Sánchez ha expuesto un plan de recuperación económica sin aludir a la situación en la que quedará el país tras el estado de alarma, pero también sin concretar medidas económicas, más allá de la prórroga de otros tres meses -a partir del 9 de mayo- de laprohibición de desahucios y la moratoria de alquileres de las personas vulnerables sin alternativa habitacional. Arrimadas le ha reprochado no haber consensuado «con nadie» su propuesta y haber «vendido» lo mismo «nueve veces como propaganda».
«Ha dicho que no va a prorrogar el estado de alarma. ¿Se puede saber qué van a poder hacer los españoles a partir del 9 de mayo?», ha cuestionado Arrimadas, quien ha aseverado que a los ciudadanos no les importa tanto si hay estado de alarma o restricciones a través de una ley orgánica, como el hecho de si van a poder visitar a sus familiares, si habrá toque de queda, si podrán abrir sus negocios o dónde deberán llevar mascarilla.
Plan de concienciación provacunas
Arrimadas, que al contrario que en anteriores ocasiones ha evitado la confrontación directa con el PP, sí le ha dicho a Sánchez que entiende que le eche en cara a los populares que hayan cambiado «muchas veces de criterio» -ha apuntado que Isabel Díaz Ayuso, ahora mismo, manifiesta posiciones contrarias al PP andaluz, por ejemplo-, pero que de su partido, que ha apoyado todas las prórrogas del estado de alarma, no puede decir lo mismo.
La líder de Cs ha querido saber si el presidente mantiene su optimismo con la vacunación -promete que a finales de agosto 33 millones de españoles estarán vacunados- a pesar de los reveses de los últimos días con las vacunas de AstraZeneca y de Janssen -esta última ha paralizado su suministro hasta que se resuelva su posible relación con algunos trombos detectados-. Pero además, Arrimadas ha reclamado a Sánchez un plan de concienciación «para luchar contra los miedos y contra los bulos, y que no haya miedo a vacunarse». También ha pedido, una vez más, una coordinación nacional para que no haya diferencias sustanciales entre comunidades en la vacunación.
Después, la presidenta de los liberales ha enumerado datos obviados por el jefe del Ejecutivo, como que de las 800.000 familias que necesitan el ingreso mínimo vital promovido por el Gobierno solo lo han recibido 200.000; que hay 750.000 españoles en ERTE que aún no saben qué sucederá con su puesto de trabajo cuando dejen de estar en vigor; o que los comerciantes y hosteleros siguen sin recibir ayudas directas -ya exigidas por Cs en la frustrada negociación de los Presupuestos Generales del Estado-, mientras se concede un rescate millonario a la aerolínea Plus Ultra.
«La propaganda puede garantizar su futuro político, pero no el futuro de un país. El futuro de un país se construye con su país, no con Iván Redondo [jefe de Gabinete de Sánchez]», ha clamado, antes de interrogar al presidente sobre las reformas que presentará en Bruselas: «Cuando vaya a Bruselas, ¿qué reforma educativa va a llevar, la ley Celaá, la menos apoyada? Cuando habla de la reforma laboral, ¿qué va a llevar, el documento firmado por Adriana Lastra con Podemos y Bildu? ¿Cuando haya que reformar la Justicia qué va a llevar, la reforma del Consejo General del Poder Judicial? ¿Va a llevar la reforma de las pensiones del señor Escrivá?».
Qué pasará con las pensiones
Tras ello, Arrimadas ha mostrado un gráfico de la pirámide poblacional española y ha apuntado que su hijo, nacido el año pasado, tendrá ochenta años en el año 2100 y que ahora mismo tiene un futuro incierto. La líder de los liberales ha reclamado «salir de la burbuja política» y trabajar conjuntamente por un nuevo Pacto de la Moncloa para garantizar que se puedan pagar las pensiones en el futuro; algo para lo que ha abogado por políticas de incentivo de la natalidad, habida cuenta de la presión que tendrán los jóvenes actuales cuando se jubile la generación del ‘baby boom’, mucho más numerosa y con sueldos mayores que los actuales. «No se puede ir de aquí sin decir qué va a pasar el 9 de mayo. No se puede salir de esta con propaganda y con discursos guerracivilistas», ha concluido Arrimadas.
