Las aguas vuelven a su cauce, al cauce que nunca debió perderse. Es una leyenda del Real Madrid, su mejor guardameta de la historia, y Casillas regresa a la casa de la que nunca debió irse. Él cometió errores en su día que alimentaron su marcha, su relación con el club se enfrió y y su adiós del Real Madrid en 2015 no gustó ni al jugador ni a la entidad. Fue una despedida abrupta, fea, deslucida, porque el propio Íker quiso hacerlo en solitario. Fue tan deslucida, en comparación a sus méritos, que al día siguiente se realizó otra despedida, ya con mucha más presencia del madridismo oficial y popular. Han pasado cinco años. Íker retorna a su casa. Es feliz. Y el Real Madrid también. Recupera a un mito.
Casillas tenía la idea inicial de trabajar con los chavales. Vuelve para trabajar en la Fundación. Desde su salida del club y sobre todo después de haber puesto fin a su carrera como futbolista tras su infarto, Iker Casillas había manifestado en múltiples ocasiones que su intención era volver algún día al Real Madrid. Un deseo que este martes se ha visto cumplido con el anuncio del club blanco sobre su regreso.
«El Real Madrid C. F. comunica que Iker Casillas se incorpora a la Fundación Real Madrid como adjunto al director general», ha anunciado el club madrileño en un comunicado oficial, que recuerda que «Iker Casillas es leyenda del Real Madrid, representa los valores de nuestro club y es el mejor portero de nuestra historia». La nota, tras un repaso a su trayectoria deportiva y su dimensión humana, «reconocidas con prestigiosos galardones», explica que para el club «es un orgullo recibir de vuelta a casa a uno de sus grandes capitanes».
Casillas ejercerá realmente una labor de representación del la Fundación por el mundo. Será un embajador. Tendrá que viajar a muchos sitios donde la Fundación ayuda a tantos miles y miles de niños del mundo, que pueden jugar al fútbol gracias al apoyo del Real Madrid. Niños que juegan al fútbol con una pierna, con muletas. Mayores que juegan al baloncesto desde una silla de ruedas. Discapacitados que son felices por poder jugar gracias a esa ayuda. Casillas será reclamados en muchos lugarers. Y tendrá que ir. Es un mito y tiene que estar donde el madridismo le llame.
«Orgulloso de volver a casa. Afronto este nuevo reto con toda la ilusión y ganas del mundo, gracias por la bienvenida», manifiesta Casillas. Es una nueva era.
