El Gobierno aprobará el próximo martes la ley que sustituirá al estado de alarma

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido hoy en el Congreso de los Diputados para pedir la aprobación de la “última y definitiva” prórroga del estado de alarma, una nueva ampliación que mantendrá la excepcionalidad en España 15 días más. El 21 de junio expirará, por tanto, cualquier restricción -incluida la limitación de la libertad de movimientos- y esto obliga al Ejecutivo a maniobrar para crear una base normativa que permita regular la situación de “nueva normalidad” que comenzará en este momento, ante el riesgo sanitario de que surjan eventuales repuntes en la pandemia.

Por ello, Sánchez ha anunciado que el próximo martes el Consejo de Ministros aprobará un real decreto ley en el que se buscará “aunar en una sola norma todas las medidas sanitarias de prevención, contención y coordinación para hacer frente al virus y evitar el riesgo de rebrotes hasta que exista una vacuna”. La norma se consensuará con las comunidades autónomas en un próximo Consejo Interterritorial de Salud, aún sin fecha. El Gobierno cumple así uno de los compromisos que habían contraído con Ciudadanos, para que vote a favor de la prórroga, y que había ubicado en el horizonte máximo del 15 de junio el plazo para alumbrar una norma para la salida del estado de alarma.

Precisamente, el presidente ha defendido este mecanismo constitucional como “una herramienta fundamental para detener la pandemia” y que ha permitido que hoy tengamos cero fallecidos. “Quienes han ayudado a aprobar estas prórrogas han colaborado al objetivo de salvar vidas”, ha señalado Sánchez, que posteriormente criticaba el “misterio” de aquellos partidos -como PP y Vox- que en los albores de la epidemia consideraron que el estado de alarma era necesario, pero que en los últimos tiempos se han venido oponiendo a su mantenimiento. “Quienes se opongan que no utilicen la limitación de libertades para ello, la única libertad que se ha limitado es la de contagiar”, ha señalado.

El jefe del Ejecutivo ha reiterado su apreciación de que el único enemigo es el virus, al que hay que combatir unidos desde la política. “El virus no puede ser la excusa para confrontar y menos utilizando a las víctimas para ello o apropiándose de una bandera que es la de todos”, ha destacado. Sánchez ha asegurado que “no hay ningún gobierno en el mundo preparado para la sacudida” que ha supuesto el coronavirus y ha calificado como “prudente” e “inteligente” la desescalada que se ha llevado a cabo por el Gobierno y que permitirá que en esta última fase (III), los gobiernos autonómicos puedan asumir las riendas de la gestión de la misma, convirtiéndose en la “única autoridad delegada” para ello.